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Por Ellen Wulfhorst y Phil Stewart
NUEVA YORK/WASHINGTON (Reuters) - El Ejército estadounidenseaisló a más de una decena de soldados que regresaban de ÁfricaOccidental en una base en Italia pese a que ninguno de ellosmanifestó síntomas de la enfermedad, mientras que una enfermeraque atendió pacientes en Sierra Leona fue dada de alta el lunestras estar en cuarentena.
La decisión del Pentágono va mucho más allá de losprotocolos previos. El Ejército aisló a varios soldados de unabase en Vicenza, Italia, incluyendo al mayor general DarrylWilliams, quien supervisó la respuesta inicial al brote de laenfermedad, que ya ha dejado unos 5.000 muertos.
Más soldados serán aislados en los próximos días mientras lamisión va rotando en África Occidental, donde el Ejércitoestadounidense ha estado construyendo infraestructura paraayudar a las autoridades sanitarias a tratar a las víctimas delébola, dijo el Pentágono.
"No se les permite salir", dijo el coronel Steve Warren,portavoz del Pentágono, quien describió las precauciones comouna "observación reforzada".
Algunos funcionarios estatales han dicho que lasrestricciones federales a las personas que viajan desde paísesafectados por ébola son insuficientes para proteger a losestadounidenses y han instaurado medidas más duras, comocuarentenas automáticas para los trabajadores médicos quevuelven de África.
El caso de la enfermera Kaci Hickox, puesta en cuarentena elviernes bajo medidas de Nueva Jersey que exceden las adoptadaspor el Gobierno nacional, fue una clara muestra del dilema queafrontan las autoridades.
El gobernador de Nueva Jersey Chris Christie dijo aperiodistas que no cambió su política al permitir que laenfermera sea dada de alta del hospital y autorizada a viajar aMaine.
"Estamos felices de que ella haya sido dada de alta. No tuvosíntomas por 24 horas y dio negativo de ébola, por lo que nohabía razones para retenerla", sostuvo Christie.
"Pero ella debe entender que la obligación de losfuncionarios electos es proteger la salud de toda la gente",afirmó.
En tanto, un niño de 5 años que llegó de Guinea está siendoobservado en aislamiento en el Bellevue Hospital de Nueva Yorkpor posibles síntomas de ébola.
La exposición del niño al virus no está muy clara, dijo lacomisionada de Salud de Nueva York, doctora Mary Travis. "Él haviajado (...) a uno de los tres países afectados y tiene fiebre.Y eso llevó a una evaluación de su estado de salud", explicó.
Hasta el momento, cuatro personas han sido diagnosticadascon ébola en Estados Unidos. El primero fue un liberiano devisita en Texas que murió en septiembre, en un caso repleto deerrores. Dos enfermeras que le trataron contrajeron laenfermedad, pero se recuperaron.
Por su parte, el portavoz del presidente Barack Obama, JoshEarnest, dijo el lunes que la Casa Blanca no está entusiasmadacon las cuarentenas implementadas por los estados, peroreconoció el derecho de las autoridades locales a tomar estasmedidas.
"Queremos asegurarnos de que cualquier política que se poneen práctica en el país para proteger al público no sea undesincentivo para que los médicos y las enfermeras viajen aÁfrica Occidental a tratar pacientes", sostuvo Earnest.
Nueva Jersey, Nueva York e Illinois están imponiendo unacuarentena obligatoria a cualquiera que llegue con alto riesgode haber contraído ébola en África.
Las nuevas reglas fueron impuestas un día después de que unmédico neoyorquino, Craig Spencer, fue diagnosticado con ébolatras regresar de tratar a pacientes en Guinea. Spencer se moviólibremente por la ciudad antes de mostrar los síntomas.