Diez años después de ganar su segundo abierto femenino de Estados Unidos, la jugadora del equipo profesional de Callaway Golf (NYSE:ELY), Annika Sorenstam, consiguió ayer su segundo triunfo derrotando a Pat Hurst.
El margen de victoria supuso el más amplio en un abierto de Estados Unidos femenino en 50 años.
Como en cada una de sus victorias, Sorenstam confió de nuevo en el equipamiento de Callaway Golf(R) para hacer historia.