
Las entidades financieras y los bancos de inversión españoles están mostrando interés por Banco Espírito Santo (BES) el segundo mayor banco de Portugal que esta semana fue escindido en un banco "bueno" y otro "malo", según fuentes del sector.
No obstante, los bancos españoles y sus asesores están aún en la fase inicial de analizar la posibilidad de comprar Novo Banco, el banco "bueno", indicaron.
Bancos como Banco Santander, CaixaBank, Banco de Sabadell y BBVA serían los compradores lógicos de Novo Banco, afirman fuentes cercanas a los bancos de inversión. Además de por la obvia cercanía geográfica y cultural entre los dos países, varios de esos bancos ya tienen presencia en Portugal.
El banco central portugués anunció el domingo un plan para escindir Banco Espírito Santo y separar los activos tóxicos de los depósitos de los clientes y los activos sanos.
Sin embargo, los directivos de bancos españoles y sus socios reconocen que comprar Novo Banco sería difícil.
Para empezar, todo es muy reciente y aún no se sabe qué hará Portugal para devolver el banco a manos privadas. El país podría decidir vender Novo Banco a un único comprador o vender el banco a inversores a través de varias ventas de participaciones durante un par de años, como está haciendo España con la nacionalizada Bankia.
Es probable que Portugal analice ambas posibilidades para determinar qué opción le reporta más dinero, mientras trata de recuperar la mayor parte posible de los 4.400 millones que inyectará al banco, señalan las fuentes.
Portugal, poco atractivo
Por otro lado, Portugal, un pequeño mercado de unos 10 millones de consumidores, no es el país más atractivo donde expandirse. La deflación, una amenaza para algunos de los países más importantes de la eurozona, ya se ha apoderado de Portugal. La deuda pública ronda el 130% del Producto Interior Bruto del país.
Esto significa que no hay garantías de que los bancos españoles quieran aumentar su presencia en su país vecino.
Santander, el segundo mayor banco de España por valor de mercado, ya tiene una filial en Portugal. Santander Totta tiene 626 sucursales y una cuota del 10% de los préstamos y los depósitos. CaixaBank, el tercer mayor banco de España, tiene una participación del 44,1% en Banco BPI. Sabadell en julio aumentó su participación en Banco Comercial Portugues hasta el 5,5% desde el 4,3%.
Y BBVA, el segundo mayor banco de España, ha intentando vender su filial en Portugal, según fuentes cercanas a la venta, pero dio marcha atrás ante el escaso interés. Barclays también intenta vender su negocio minorista en Portugal.
En teoría, el banco bueno debería tener un balance saneado. Pero los compradores potenciales y los asesores siguen preocupados por posibles sorpresas negativas después de meses de inquietantes revelaciones de Banco Espírito Santo.
Esperar a los test de estrés
Estas dudas podrían retrasar cualquier análisis serio hasta después de octubre, cuando las autoridades de la eurozona publiquen los resultados de sus exámenes y sus pruebas de solvencia a la banca de la región. Si no hay novedades sobre Banco Espírito Santo, eso podría facilitar que potenciales compradores se interesen en analizar el banco, señalan las fuentes.
Algunos banqueros han mostrado también interés en comprar carteras de préstamos del banco bueno a medida que avance el proceso de reestructuración.
Sin embargo, Portugal se ha mostrado receloso en el pasado de permitir que España entre en su sector financiero. Además, las tensiones históricas entre ambos países podría llevar a los bancos españoles a pensar con calma la posible compra del banco bueno de Banco Espírito Santo.
Otros posibles compradores del banco bueno de Banco Espírito Santo, afirman las fuentes del sector, serían los propios bancos portugueses en busca de aumentar su cuota de mercado, o los bancos de Brasil o de Angola en busca de presencia en Europa, además de fondos de inversión internacionales.