
La fundación filantrópica que encabezan el fundador de Microsoft, Bill Gates, y su mujer Melinda, ha invertido más de un millón de dolares en primas para fomentar el desarrollo un preservativo masculino ultra fino y resistente.
El proyecto, que ya ha dado sus primeros frutos, consiste en la creación de un material que han bautizado como "hidro-gel" y que combina una alta resistencia con un tacto que los científicos aseguran que se comporta como la piel, y "tiene un tacto y una apariencia" similar a ella.
Sin resistirse al juego de palabras, Gates se refirió al proyecto en marzo diciendo que "es un tema sensible". Ya más serio, el informático explicó que al impulsar la innovación se pretende luchar contra la transmisión del virus que causa el SIDA, informa Business Insider.
Se trata, según los Gates, de que aquellos hombres en países emergentes que aún rechazan usar preservativo tengan menos excusas a la hora de usar los métodos anticonceptivos de barrera.
Tras subvencionar con 100.000 dólares cada uno de los 12 proyectos preliminares, la Universidad de Wollongong (Australia) parece una firme candidata a alzarse con el premio prometido por el matrimonio Gates: un millón de dólares adicional que permitirá convertir el prototipo en un producto comercializable.