Por Jesús Aguado
MADRID (Reuters) - El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) anunció el lunes que había acordado iniciar por tercera vez el proceso de subasta de Catalunya Banc (CX) al tiempo que desveló que en paralelo procedía a la venta de una cartera de préstamos de la entidad nacionalizada.
El FROB destalló que en el marco del proceso de venta de la entidad, que inicialmente transcurrirá en dos fases, invitará a la subasta a las entidades que han manifestado su interés durante la fase de análisis del banco para que éstas presenten sus ofertas vinculantes no más tarde del 14 de julio.
"El FROB analizará las ofertas vinculantes recibidas y siempre que una no resulte sustancialmente más favorable que el resto, abrirá una segunda fase, en la que solicitará a las entidades que haya presentado las mejores ofertas en la primera fase (hasta un máximo de tres) que realicen su oferta definitiva con la posibilidad de mejorar la oferta que hayan presentado", dijo el fondo público en un comunicado.
Tras fracasar en dos ocasiones en su intento de volver a privatizar una entidad en la que se han inyectado más de 12.052 millones de euros de dinero público, el Gobierno español está ahora mismo rediseñando su estrategia de venta en su intento de minimizar el coste de dinero público.
El FROB reconoció el lunes que el proceso de venta de la entidad se producía "en paralelo con la venta por parte de Catalunya Banc de una cartera de préstamos, por la que ya se han recibido ofertas no vinculantes".
A mediados de mayo pasado tres fuentes dijeron a Reuters que el FROB estaba intentado vender de forma separada a la subasta de la entidad un paquete de préstamos hipotecarios, algunos en mora, por importe de unos 7.000 millones de euros en una operación que podría contar con garantías del Estado.
Varias fuentes dijeron entonces que el Gobierno estaba estudiando dar distintas fórmulas de ayuda para la venta de la entidad, entre las que figuraba la creación de un vehículo especial al que se trasvasarían las hipotecas y que recibiría un respaldo parcial por parte del FROB.
Diversos bancos españoles, entre ellos Santander