Por Genevra Pittman
NUEVA YORK (Reuters Health) - En los jugadores de fútbol yrugby con lesiones de cadera o ingle, el riesgo de volver atener una lesión similar aumenta entre dos y siete veces, segúndemuestra una revisión de estudios previos. Lo mismo ocurre enlos atletas mayores y en aquellos con músculos de la ingledébiles.
"No se puede prevenir el envejecimiento, pero sí una segundalesión si la primera se resuelve de manera adecuada", dijo eldoctor W. Ben Kibler, director médico del Centro de MedicinaDeportiva-Ortopedia de la Clínica de Lexington, Kentucky, y queno participó del estudio.
"Hay que dejar que la lesión se cure", agregó.
Las lesiones de cadera e ingle son comunes en los deportesque incluyen patadas, flexiones y cambios súbitos de ladirección o la velocidad de la marcha, según asegura el equipode Julianne Ryan, de la Universidad de Limerick, Irlanda, querevisó siete estudios previos sobre factores de riesgo de esaslesiones en un grupo de atletas.
Las investigaciones habían incluido un total de 1.875jugadores de fútbol, rugby y fútbol australiano amateurs yprofesionales. Todos eran hombres; el seguimiento había duradoentre una temporada y 10 años.
Como las evaluaciones de las lesiones variaron entre losestudios, los autores no pudieron determinar la frecuencia.
En la mayoría de los estudios, los atletas con una lesión decadera o ingle previa eran más propensos a tener una segundalesión que el resto, según publica el equipo en British Journalof Sports Medicine.
Dos de los tres estudios que se habían concentrado en laedad como un factor de riesgo potencial detectaron más lesionesen los atletas mayores. Dos estudios mencionaban la debilidad delos músculos de la ingle como un posible factor de riesgo.
Varios estudios sugerían también que el rango de movilidadde la cadera y la fuerza relativa de los distintos gruposmusculares estarían asociados con el riesgo de repetir lalesión.
Dos estudios habían llegado a conclusiones opuestas: unosugería que los atletas más pesados tenían más riesgo delesiones y el otro afirmaba que los atletas más delgados eranlos de más riesgo. Pero ese segundo estudio había incluidoapenas 29 atletas y cuatro lesiones de ingle crónicas.
El "argumento más sólido", para los autores, es que losatletas más pesados son más propensos a padecer una lesión decadera o ingle que los más delgados.
El doctor Adam Weir, del Hospital Aspetar de MedicinaDeportiva y Ortopedia, Doha, Qatar, aseguró que losinvestigadores saben muy poco sobre qué es lo que predispone atener una lesión en la ingle. Pero dijo que una lesión previapermite arriesgar que se tiene alguno de esos factores deriesgo.
"Cuando la estructura o el tejido se lesiona, normalmente nose curará como antes de la lesión. Esa es la receta ideal parauna nueva futura lesión", dijo Weir.
Weir recomendó que los atletas que sufren una lesiónfortalezcan la zona afectada antes de volver al campo de juego.
FUENTE: British Journal of Sports Medicine, online 2 demayo del 2014.