El nuevo capitán de la inmobiliaria catalana no ha esperado demasiado para poner un pie en el barco y tomar contacto con la tripulación. Y es que el ex consejero delegado de Prosegur se encuentra en la oficina de la promotora de Madrid, donde ha mantenido varias reuniones a lo largo de esta mañana con directivos de Habitat, según informaron fuentes cercanas a la compañía. ¿Cuánto ha caído el precio de la viviendausada en 2008?.
Su objetivo es hacer una primera toma de contacto para conocer todos los detalles de la compañía. No obstante, Paraja ya conoce el funcionamiento del que será su futuro hogar porque el ejecutivo ya estuvo en las oficinas a finales de diciembre con el objetivo de entrar en la cúpula a mediados de enero. Lo que ocurrió es que ese fichaje no se llegó a cerrar ese mes y han tenido que pasar más de cinco meses para que se sellara el contrato de Paraja.
Lo que está claro es que las tareas del nuevo director general no serán nada fáciles. Deberá hacer frente a la oleada de despidos que ha presentado Habitat y que afectará a la mitad de los empleados. A esta medida, también hay que añadirle el proceso de reducción de plantilla que llevará a cabo la promotora en su filial de comercialización, Don Piso, donde se recortarán 350 puestos de trabajo.
La compañía espera reducir costes con estas medidas ante la menor previsión de ingresos. Y es que los pagos correspondientes a la deuda serán su peor pesadilla pese al acuerdo de refinanciación que cerró a principios de marzo con varias entidades financieras. La promotora deberá pagar más de 100 millones de euros en concepto de intereses, ya que la amortización del pago prinicpal del préstamo se ha congelado hasta 2010.
Una junta calentita
Lo lógico es que el nuevo director general también coja apuntes estos días sobre la actividad y situación de la inmobiliaria, ya que tendrá una gran cita el próximo 17 junio: ese día se celebrará la junta de accionistas, una cita que se plantea calentita si se tiene en cuenta que una parte de los accionistas minoritarios (José Antonio Castro -presidente de Hesperia- y María Dolores Ortega -sobrina del empresario Amancio Ortega-) interpusieron una querella criminal a los gestores de Habitat por estafa. La familia Figueras y Suñol controlan casi el 55% del capital.
Y es que estos inversores se sienten engañados, pues, a su juicio, Bruno Figueras les vendió un proyecto inmobiliario que tenía mucho potencial a finales de diciembre de 2006 y un año después la compañía ha estado en el precipicio del concurso de acreedores. Un ambiente que estará rodeado de unas cuentas anuales con números rojos correspondientes a 2007.
