Empresas y finanzas

Nueva marcha en Tailandia, donde los agricultores siguen descontentos

BANGKOK (Reuters) - Unos pocos cientos de manifestantes tailandeses contrarios al Gobierno mancharon hacia la sede del partido gobernante el miércoles, mientras que productores de arroz seguían acampados en otra parte de la capital exigiendo el dinero que les adeuda el estado.

El movimiento político que tiene como objetivo derrotar a la primera ministra Yingluck Shinawatra afronta su quinto mes, pero su líder Suthep Thaugsu cerró varios puntos importantes de protesta durante el fin de semana por un descenso en el número de simpatizantes.

El Gobierno está lidiando también con las acciones de los agricultores, normalmente sus más firmes partidarios, que protestan por un plan de subsidios al arroz que salió muy mal, dejando a cientos de miles de ellos sin cobrar y causando grandes pérdidas presupuestarias.

El miércoles, el banco estatal que gestiona el plan dijo que esperaba empezar a pagar algunos atrasos la próxima semana pero la suma anunciada no impresionó a los agricultores que han estado manifestándose ante el Ministerio de Comercio durante semanas.

"Esos 30.000 millones de bahts (unos 680.000 euros) es una cifra muy pequeña comparada con el total de 130.000 millones de baths que el Gobierno debería habernos pagado desde octubre", dijo Kittisak Waraha, uno de los líderes de los agricultores, refiriéndose a la cantidad citada por responsables a principios de este año.

Los manifestantes antigubernamentales de Suthep se han mantenido en su mayoría en el parque Lumpini, en el centro de Bangkok, desde el fin de semana.

Pero cerca de 300 miembros de un grupo aliado dirigido por estudiantes se dirigió el miércoles a la sede del partido Puea Thai de Yingluck, después haber participado en las vagas conversaciones separatistas de algunos de los seguidores de la mandataria, incluyendo la sugerencia de que el Gobierno podría trasladarse de Bangkok a su bastión en el norte, Chiang Mai.

Colocaron una pancarta en el edificio que decía "Paren la campaña para dividir Tailandia" pero abandonaron el lugar poco después y no hubo confrontación.

Después de trasladaron brevemente al departamento de impuestos especiales como parte de una campaña para parar el funcionamiento de ministerios y agencias estatales, que Suthep dijo que se intensificaría a pesar de que sus partidarios pusieron fin al bloqueo de las principales calles de la capital tailandesa el fin de semana.

El Gobierno impuso el estado de excepción durante 60 días el pasado 21 de enero para contener los últimos disturbios en un conflicto que dura ocho años y enfrenta, en términos generales, a la clase media de Bangkok, los monárquicos y los tailandeses del sur del país contra partidarios en su mayoría de procedencia rural de la primera ministra y su hermano, su predecesor Thaksin Shinawatra.

El martes se dijo que el estado de excepción podría ampliarse hasta que finalicen por completo las protestas y no haya más violencia.

Sin embargo, el foco de atención se está trasladando de las calles a los esfuerzos judiciales para derrocar a Yingluck, incluyendo un cargo de negligencia en el cumplimiento del deber contra ella presentado por la Comisión Nacional Anticorrupción (NACC, por sus siglas en inglés) por el fiasco del plan del arroz.

Tiene hasta el 14 de marzo para defenderse. La NACC decidirá entonces si hay caso y, en caso de seguir adelante, la mandataria podría verse obligada a dimitir.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky