Empresas y finanzas

Prueban en seres humanos test para detectar enfermedad de Lyme persistente

Por Kathryn Doyle

NUEVA YORK (Reuters Health) - Un pequeño experimento paradeterminar si garrapatas sin infectar podrían "diagnosticar" lainfección de Lyme persistente tuvo resultados "modestos".

En un grupo de pacientes con síntomas persistentes de laenfermedad que habían recibido tratamiento, dos participantesles transmitieron a las garrapatas sanas el ADN del parásito queproduce la enfermedad, pero no los parásitos vivos.

Ya se había utilizado con éxito el "xenodiagnóstico" (diagnóstico con otro animal) en ensayos con animales paradetectar signos de una infección de Lyme persistente en sangre.

La técnica también había dado buenos resultados en ladetección de otra infección parasitaria, la enfermedad deChagas, en seres humanos. Pero el nuevo estudio, publicado enClinical Infectious Diseases, describe el primer intentode xenodiagnóstico de la enfermedad de Lyme.

"Es un primer estudio. Nuestro objetivo era desarrollar latécnica en seres humanos", dijo la autora principal, doctoraAdriana Marques, de los Institutos Nacionales de Salud,Bethesda, Maryland. "Es muy difícil hallar evidencia de unabacteria, no sólo los anticuerpos, en personas infectadas cuandodesapareció la erupción de la piel".

Este método con garrapatas facilitará el proceso, pero sólocon la ayuda de más estudios. La mayoría de las personas conenfermedad de Lyme mejoran con el uso de antibióticos durante unpar de semanas. A las cuatro semanas, los pacientes sin rastrosde la bacteria en sangre reciben el alta definitiva.

Pero un 10-20 por ciento de las personas con enfermedad deLyme, que se transmite por la picadura de una garrapata infectada, continúa con dolores, fatiga y molestias aunque lainfección parece haber desaparecido. Los síntomas duran más deseis meses y reciben el nombre de Síndrome de LymePostratamiento (SLPT).

Los autores probaron este método de segunda picadura, que yase había probado en ratas y monos, en un grupo de personas conSLPT: 26 de los 36 participantes tenían síntomas persistentesdespués de haber recibido el tratamiento o aún conservaban unalesión en el sitio de la picadura o tenían niveles inusualmenteelevados de anticuerpos a pesar de que el tratamiento parecíahaber sido exitoso.

Los 10 voluntarios restantes nunca habían tenido enfermedad de Lyme. El equipo les colocó 25-30 garrapatas sin infectar enel brazo de cada participante, debajo de una prenda especial, yse las quitaron varios días después para mantenerlas enincubación durante un período de hasta dos semanas y quecualquier bacteria pudiera desarrollarse. Luego, las sometierona distintas pruebas moleculares.

Ninguna garrapata de los voluntarios sanos tenía rastros dela bacteria que produce la enfermedad de Lyme. Pero el equiporecolectó garrapatas vivas de 23 participantes que habían tenidola enfermedad de Lyme y los parásitos de 21 de esosparticipantes no tenían rastros de la presencia de la bacteria.

En los dos participantes restantes, los resultados no fueron demasiado claros. Uno tenía síntomas persistentes después decompletar el tratamiento antibiótico y el otro había iniciado eltratamiento con una erupción persistente. Las garrapatas deesos dos pacientes tenían fragmentos del ADN de la bacteria.

"El próximo paso será ver si los resultados se correlacionancon los síntomas persistentes. Por ahora, no lo podemosresponder", dijo Marques.

Por ahora, esa presencia del ADN de la bacteria no influyeen la salud de los pacientes.

FUENTE: Clinical Infectious Diseases, online 11 defebrero del 2014.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky