El presidente y socio fundador de Zinkia, José María Castillejo, ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad y ha asegurado que sigue trabajando en el futuro de la marca Pocoyó y de la firma ajeno a la "guerra accionarial" en la compañía, que dispone de menos de quince días para decidir si se acoge al concurso de acreedores o presenta un acuerdo de refinanciación de su deuda, cercana a unos 11 millones de euros.
"Estamos trabajando en condiciones adversas y lo estamos haciendo, si cabe, con más ilusión y más fuerza", ha asegurado Castillejo en declaraciones a Europa Press.
Pese a la situación financiera de la compañía, que ha revisado a la baja su previsión de ingresos y de Ebitda para 2013, con un 41% y un 97% menos, respectivamente, a instancias del Mercado Alternativo Bursátil (MAB), el presidente de Zinkia ha expresado su "firme" confianza en el desarrollo del negocio y ha subrayado el liderazgo mundial de la marca Pocoyó en su segmento.
Castillejo ha asegurado que está centrado en resolver los "problemas" que puedan afectar a la compañía, porque es su "obligación" como empresario.
El socio fundador de la productora de Pocoyó controla a través de la sociedad Jomaca 98 el 64,7% del capital social de la compañía. El otro principal accionista de Zinkia es el empresario mexicano Miguel Valladares, con una participación del 11,2%.