El juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez Bermúdez considera que existen indicios de delito contra el exdirector general de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) Roberto López Abad y el expresidente de la Comisión de Control Juan Ramón Avilés por el cobro irregular de dietas y la concesión de créditos en condiciones ventajosas a las empresas de la familia de este último que causaron un perjuicio a la entidad de 4,91 millones de euros.
En un auto en el que transforma las diligencias en procedimiento abreviado, equivalente al procesamiento, Gómez Bermúdez atribuye a Avilés los delitos de apropiación indebida, administración desleal y otorgamiento de contrato simulado en perjuicio de tercero y a Abad los dos primeros.
El magistrado sostiene que los imputados diseñaron "una estrategia" para que los miembros de la Comisión de Control de la CAM recibieran "cuantiosas sumas de dinero" entre los años 2007 y 2011 en forma de "dietas irregulares" que no se correspondían con la realización de "ninguna actividad real". Para ello, crearon la Comisión de Seguimiento y Control de la sociedad 'Tenedora de Inversiones y Participaciones', participada por la entidad financiera.