
El tríptico de Francis Bacon 'Tres Estudios de Lucian Freud' se convirtió este martes en la obra de arte vendida más cara al alcanzar los 142,2 millones de dólares (unos 106 millones de euros) en una subasta en Christie's en la que se vendieron casi 700 millones de dólares en arte.
El cuadro de 1969, que no se había ofrecido nunca en una subasta y que tenía un valor estimado de venta de cerca de 85 millones de dólares, eclipsó fácilmente el precio de 119,9 millones de dólares de 'El Grito' de Edvard Munch, alcanzado en mayo del año pasado en Sotheby's.
La obra fue vendida después de una prolongada guerra de ofertas en una sala de ventas repleta en Nueva York. El comprador fue la Galería Acquavella, que podría haber hecho la oferta en nombre de un cliente.
El panel muestra al amigo y también artista del pintor dublinés Lucian Freud en una silla, con una vista de cada lado y otra enfrente. Christie's la calificó de "una verdadera obra de arte que marca la relación de Bacon y Freud" y su "familiaridad creativa y emocional".
La obra también es uno de los dos únicos trípticos completos de Freud, nieto del fundador del psicoanálisis Sigmund Freud. Los tres paneles estuvieron 15 años separados en los años 70 antes de ser reunificados.
El anterior récord para un cuadro de Bacon estaba en 86,3 millones de dólares.
Se vendieron 700 millones de dólares en arte
La venta de 69 obras de arte contemporáneo y de la posguerra llegó a 691 millones de dólares, incluyendo las comisiones, muy por encima de las estimaciones de entre 480-670 millones de dólares, convirtiéndola en la más cara de la historia y eclipsando la que celebró esta misma casa en mayo de arte contemporáneo, que sumó casi 500 millones de dólares.
Responsables de las casas de subastas aseguran que la existencia de nuevos millonarios de todo el mundo está impulsando los precios del arte, especialmente de sus obras más conocidas, a niveles récord.
"Estamos en una etapa muy inicial de desarrollo de este mercado", dijo Brett Grovy, jefe de arte contemporáneo y de posguerra de Christie's. "Muchos coleccionistas de todo el mundo están entrando en el mercado. Y esto no es una burbuja", aseguró.