Madrid, 29 jul (EFECOM).- Las huelga protagonizada ayer por los trabajadores de "handling" de Iberia en el aeropuerto de Barcelona afectó también hoy al aeropuerto de Barajas, en el que cientos de pasajeros hicieron cola durante horas para poder volar, en una jornada de finales de julio con especial afluencia de público.
El aeropuerto de Barajas tiene previsto operar hoy 1.006 vuelos con un total de 159.939 plazas ofertadas, del total de 7.028 operaciones previstas desde ayer hasta el próximo 2 de agosto, en plena operación de regreso y salida de vacaciones.
AENA afirmó que la operatividad en Baraja es normal, sin incidencias relevantes, aunque se registran diferentes retrasos en la ruta Madrid-Barcelona.
El aeropuerto de Barajas recuperó a lo largo de la jornada de hoy la normalidad en los vuelos entre Madrid y Barcelona, en los que no hubo cancelaciones pero sí retrasos de entre una y tres horas, según constató Efe.
Los mayores retrasos los acumuló Iberia, que reanudó la ruta Madrid-Barcelona, suspendida desde las 10.00 horas de ayer a las 07.00 horas de hoy "con lentitud", según informó la compañía.
A lo largo de la jornada la aerolínea tuvo retrasos de al menos dos horas en todos los vuelos de esa ruta, y acumuló demoras de varias horas en destinos nacionales como Vigo, Palma de Mallorca, Santiago y Gran Canaria, y destinos internacionales como Tel Aviv, Oporto o Londres.
La compañía no especificó si los retrasos en estas rutas están relacionados con la huelga o se debieron a otros motivos.
Cientos de pasajeros hicieron cola hoy, al igual que ayer, ante las oficinas de Iberia, la mayoría procedentes de vuelos internacionales con destino a Barcelona que durante la escala en Madrid fueron informados de que debían recoger su equipaje y adquirir un nuevo billete hacia Barcelona debido a los reajustes realizados por la huelga, según explicaron varios de ellos a Efe.
Otros llegaron de Barcelona y de otras ciudades españolas a Madrid con varias horas de retraso debido a la huelga en El Prat, lo que hizo que perdieran su vuelo siguiente a destinos como Estambul, Chicago o Bogotá.
Los pasajeros en tránsito que no pudieron volar hoy fueron alojados en hoteles por Iberia hasta mañana, mientras que a los que pretendían volar únicamente entre Madrid a Barcelona y no pudieron se les ofreció la devolución del importe, cambiar el billete para otro día o viajar a Barcelona en autobús.
Todos los pasajeros consultados expresaron su malestar "por la falta de información y el trato recibido por Iberia, que nos hace esperar durante horas enviándonos de un mostrador a otro", según resumió una chica que llegó de Sevilla a Madrid con cuatro horas de retraso, lo que impidió que cogiese un vuelo a Chicago y su posterior conexión a Los Angeles.
También criticaron "que a pesar de llevar horas esperando no nos ofrezcan un vale comer y beber algo". EFECOM
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