
El presidente de Damm, Demetrio Carceller, ha dejado hoy claro que "mientas tenga un duro y hasta que le quede un hálito de vida peleará" por salvar su inversión en Pescanova y ha precisado que tiene previsto dotar otros siete millones por Pescanova, que se suman a los 21 millones ya provisionados.
En un encuentro con periodistas previo a la junta de accionistas de la compañía cervecera, Carceller ha arremetido contra el presidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa, por someter al consejo a un "auténtico secuestro".
Preguntado por si cree que los críticos con Fernández de Sousa tendrían la mayoría suficiente para forzar cambios en caso de convocatoria de una junta en Pescanova, Carceller ha afirmado: "Se enroca porque sabe que la mayoría de los accionistas se van a sentir engañados y estafados por él".
Resultados intactos
Carceller ha confirmado que la semana pasada Damm se presentó como parte perjudicada en la querella presentada en la Audiencia Nacional por un grupo de minoritarios y está a la espera de que el juzgado de lo mercantil número 1 de Pontevedra atienda la convocatoria de una junta de accionistas extraordinaria formulada por la propia Damm, Iberfomento, Luxempart y SMH.
En cuanto a la incidencia de la participación de Pescanova sobre la cuenta de resultados de Damm, ha comentado que supone el 2% de los activos de su empresa y ha remarcado: "No afecta absolutamente a los resultados de la compañía".
No obstante, Damm dotó 21 millones de euros en el primer trimestre del año por Pescanova y prevé provisionar a lo largo de este año otros siete más para llevar a cero el valor de su participada.
Damm, que controla un 6,20% de Pescanova, en la que ha invertido "cerca de unos 40 millones de euros", ha asegurado que desconoce la situación exacta de los estados financieros de Pescanova.
Exige justicia
La cervecera catalana se siente estafada por Fernández de Sousa, a quien pide la dimisión y al que censura que se mantenga "enquistado" en un consejo con mayoría de afines, y de hecho ha mostrado su "indignación" porque existan gestores como el presidente de Pescanova.
Por ello, Carceller ha asegurado que se perseguirá que se haga "justicia" en este caso, aunque su estrategia no pasa por presentar una querella propia, porque entiende que ya hay presentadas otras y que basta con estar personado en la causa para defender con eficacia los intereses de Damm.
A pesar de admitir que la inversión en Pescanova le ha salido "absolutamente rana" a Damm, Carceller ha subrayado que la cervecera mantendrá su apuesta por invertir en compañías españolas del sector de la alimentación interesadas en seguir internacionalizándose.
De hecho, Carceller ha contrapuesto la gestión de Fernández de Sousa con la familia Hernández, que gestiona Ebro Foods, de la que Damm tiene el 9,75%. Carceller ha elogiado la "honradez" y la visión de negocio del presidente de Ebro Foods, Antonio Hernández Callejas, y ha añadido: "No ha escondido ni un dato ni al consejo ni al mercado".
El presidente de Damm ha asegurado que por el momento la cervecera no se plantea aumentar su participación en Ebro, si bien ha reiterado que si la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) se desprende de su participación accionarial su compañía formará parte del consorcio comprador.