El Grupo Osborne acaba de celebrar su junta general de accionistas en la que se han aprobado las cuentas de 2012, cerrando la compañía este ejercicio con unas ventas netas de 222 millones de euros y un EBITDA de 32,5 millones de euros. Respecto al año anterior, la cifra de ventas crece un 7%.
Por unidades de negocio, la unidad de bebidas y vinos representa el 78% de la contribución de la compañía y la unidad de ibéricos aporta el 22% restante.
Geográficamente, el negocio internacional representa ya el 20%, correspondiendo el resto al mercado doméstico. Según explica en su comunicado, Osborne ha "conservado una sólida posición" en el mercado de bebidas espirituosas y vinos en España, apoyada en sus marcas más importantes -Carlos I, Magno, Veterano, Anís del Mono, Montecillo- e impulsada "por los buenos resultados" derivados de la distribución de marcas como Seagram's Gin, Monster Energy Drink y Ron Santa Teresa. También destacan el desarrollo y lanzamiento "exitoso" de Markham, la nueva tónica premium del Grupo.