BILBAO (Reuters) - El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, continuó en su discurso ante los accionistas con el cambio de mensaje esbozado por primera vez en los resultados anuales de 2012 y alabó la gestión del Gobierno en materia energética.
El presidente de IBERDROLA (IBE.MC) tradicionalmente uno de los más críticos con las decisiones del Ejecutivo en materia energética, aplaudió durante la junta general celebrada en Bilbao las gestiones del nuevo secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, al afirmar que, por primera vez, es probable que se encuentre una solución al problema del déficit de tarifa.
"La normativa aprobada este año da una probabilidad razonable - como no ha existido nunca en el pasado - de resolver el problema estructural del déficit en el ejercicio y, además, establece las bases para contar con un sistema de regulación estable, transparente y predecible como tenemos en otros países", declaró Galán ante sus accionistas.
Desde la entrada de Nadal, hermano del asesor económico del presidente, Álvaro Nadal, en el ministerio de Industria el pasado mes de enero, el Gobierno ha aprobado ya varias medidas para atajar el déficit y prepara una profunda reforma del sector con la intención de reducir los costes del sistema eléctrico y que en 2013 no se genere ya más deuda tarifaria.
El déficit de tarifa es un problema que arrastra el sector energético español desde hace casi ya una década, una deuda que alcanza ya los 28.000 millones de euros y que se genera por la diferencia entre los costes e ingresos regulados y reconocidos a las empresas.
Para evitar abruptas subidas del precio de la luz, en la última década los Gobiernos españoles de distinto signo político han provocado la génesis de una deuda de los consumidores con las eléctricas, avalada por el Gobierno, y que supone el pago de alrededor de 2.700 millones de euros al año en intereses.
El presidente de Iberdrola, la mayor eléctrica española por capitalización, se mostró también optimista de cara a la próxima recuperación de la economía española, algo que prevé ocurra a finales de año, con creación de empleo ya a partir de la segunda mitad de 2014.
Ante una junta que por primera vez en años se prevé tranquila después de que la constructora ACS haya reducido significativamente su participación desde el casi 20 por ciento que llegó a tener hasta el 5,74 por ciento que poseía a finales de 2012, Galán presumió de la fortaleza de la compañía y su capacidad para mantener su política de dividendos.
ACS intentó acceder al consejo de la eléctrica, lo que provocó un choque frontal entre el presidente de la constructora y el de la eléctrica por la negativa de este último a darle entrada como vocal, con conflictos judiciales y demandas cruzadas en los tribunales.
Sin embargo, las dificultades financieras obligaron al grupo presidido por Florentino Pérez a deshacer la mayor parte de su posición, aún a costa de asumir importantes minusvalías.