
Un total de diecisiete directivos del consorcio aeronáutico EADS se habrían embolsado 20 millones de euros en plusvalías por la venta de acciones poco antes de conocerse los retrasos en el programa Airbus A380 que provocó el desplome en bolsa de las acciones del grupo. Las acusaciones, formuladas por el regulador bursátil galo, la AMF, alcanzan también a sus dos principales accionistas, Jean-Luc Lagardère y DaimlerChrysler.
Esta es la conclusión del informe de la Autoridad gala de los Mercados Financieros (AMF) sobre un supuesto delito de información privilegiada difundido hoy por el sitio web Mediapart.
Información privilegiada
Estos cuadros directivos son sospechosos de "haber faltado a su obligación de abstención" de vender acciones a la vista de la información privilegiada de la que disponían y, según el informe, consiguieron unas plusvalías brutas de casi 20 millones de euros después de haber cedido en total más de 1,7 millones de títulos de sus stock-options entre el 19 de julio de 2005 y el 13 de junio de 2006.
También se ven implicados nueve cargos del Comité Ejecutivo de Airbus, los miembros del Comité Ejecutivo de EADS (EAD.PA) y al de accionistas de Airbus Thomas Enders, Noël Forgeard, quien ha reclamado su inocencia, según el diario francés Les Echos, y Jean-Paul Gut.
La AMF confirmó el pasado 1 de abril la existencia de un delito de información privilegiada en el seno del grupo europeo aeronáutico y de defensa EADS entre finales de 2005 y principios de 2006, notificó sus motivos a varias personas e implicó a EADS por haber faltado "a las obligaciones de buena información del mercado", pero no citó por su nombre a persona alguna.
"Fuga" de documentos
La investigación de la AMF gira en torno a la venta masiva de acciones por parte de los directivos de EADS antes del anuncio de nuevos retrasos en el programa del Airbus A380, que provocó el desplome de las acciones de EADS en Bolsa.
EADS ha denunciado la "fuga" que ha permitido la divulgación de estas informaciones y se ha mostrado "sorprendido" y "contrariado" al ver cómo se "burla el derecho de defensa". "El Grupo no está en condiciones de hacer comentarios antes de haber evaluado la integridad del documento con sus conclusiones", asegura.