El banco británico prescindirá de 3.700 trabajadores este año por la remodelación de sus actividades en los negocios de banca minorista y de inversión. En su filial española, esto supondrá la supresión de unos 1.100 empleos, además del cierre de 160 oficinas. Ayer, el Financial Times avanzaba que la entidad eliminaría "al menos 2.000 empleos" solo en banca de inversión.
En un comunicado remitido a la Bolsa de Valores de Londres, Barclays indica que este ajuste de personal incluirá 1.800 en su división de inversión y 1.900 en la banca minorista europea.
Pide "tranquilidad"
El consejero delegado de la filial española de Barclays, Jaime Echegoyen, ha pedido hoy a los empleados de la entidad "tranquilidad y apoyo" para afrontar un momento "clave" en la historia del banco británico, al tiempo que se ha comprometido a evitar "incertidumbre" en la negociación del ajuste.
"Somos conscientes de la incertidumbre que este anuncio genera, y queremos pediros tranquilidad mientras las partes negocian. En la medida en que las negociaciones lo permitan, os iremos comunicando avances y evitaremos en todo momento fomentar la incertidumbre", ha explicado el consejero delegado de la filial española de Barclays en una carta remitida a los trabajadores, a la que ha tenido acceso Europa Press.
Oficinas no rentables
Según han informado fuentes del banco, los planes de salidas de la filial española de Barclays ya han sido comunicados a los sindicatos en una reunión informativa y se han iniciado las negociaciones. La entidad aún no tiene definido si las bajas se articularán a través de un Expedientes de Regulación de Empleo (ERE), añadieron las citadas fuentes.
Barclays ha enfatizado que los cambios estratégicos anunciados son una "muestra" del compromiso de permanencia del Grupo Barclays en España, así como de la apuesta por el mercado ibérico, donde el grupo va a realizar una "importante" inversión en tecnología para atender esos nuevos hábitos de consumo. Sin embargo, han admitido que "las oficinas no son rentables".
La entidad reestructurará su negocio de banca minorista en Europa y reposicionará sus actividades de valores y banca de inversión en Europa y Asia con el fin de reflejar las oportunidades del mercado y mantener una posición relevante para los clientes del banco, mientras que cerrará su filial de mercados de capitales estructurados.
De este modo, Barclays espera reducir en 1.700 millones de libras (1.990 millones de euros) su base de costes, hasta 16.800 millones de libras (19.662 millones de euros) en 2015. Si embargo, se anotará en sus cuentas del primer trimestre de 2013 una carga extraordinaria por importe de unos 500 millones de libras (585 millones de euros).
"Barclays está cambiando. Queremos cambiar lo que hace Barclays y cómo lo hace", subrayó el consejero delegado de la entidad, Antony Jenkins, al anunciar las conclusiones de la revisión estratégica de las actividades de Barclays.
Pérdidas de 1.217 millones
En el conjunto del ejercicio 2012, la entidad británica ha presentado unas pérdidas por importe neto de 1.041 millones de libras (1.217 millones de euros), frente a los 3.518 millones de euros que ganó en 2011.
"No hay duda de que 2012 fue un año difícil para Barclays y para el sector bancario en su conjunto", reconoció Jenkins al informar de los resultados de la entidad, que solo en el cuarto trimestre perdió 977 millones de euros.
Las cuentas de Barclays en 2012 reflejan un impacto negativo por importe de 7.029 millones de libras (8.226 millones de euros) de varios elementos extraordinarios, incluyendo ajustes en el valor de la propia deuda del banco, así como provisiones por la comercialización inadecuada de seguros de protección de pagos y coberturas frente a la volatilidad de los tipos de interés.
La cifra de negocio de Barclays alcanzó los 29.600 millones de euros, un 23,4% por debajo del dato de 2011, mientras que sus ingresos operativos disminuyeron un 21%, hasta 24.690 millones.