Royal Bank of Scotland (RBS), controlado en un 82% por el Gobierno británico, negocia con las autoridades de Reino Unido y EEUU el pago de una multa de unos 500 millones de libras esterlinas (585 millones de euros) en relación con la presunta participación de la entidad en la manipulación del índice interbancario del mercado anglosajón (libor), después de que los bancos UBS y Barclays hayan cerrado sendos acuerdos al respecto.
El acuerdo, que aún está negociándose entre las partes, podría completarse en el curso de las dos próximas semanas, según informa el diario The Wall Street Journal, que advierte de que las autoridades estadounidenses pretenden que una filial de RBS se declare culpable de fraude, en línea con lo sucedido con una filial del suizo UBS.
"Las negociaciones con varios reguladores en relación con la fijación del libor están en curso (...) continuamos cooperando plenamente con sus investigaciones", indicó un portavoz de RBS.
En este sentido, el diario de cabecera de Wall Street señala que al menos una docena de bancos de EEUU, Europa y Asia están siendo investigados por la presunta manipulación del proceso de determinación de los tipos de libor y del euríbor.