El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, ha asegurado hoy que la reestructuración del sistema financiero español aún no ha concluido y que tanto el número de oficinas como de trabajadores del sector se reducirán aproximadamente un 15% en los próximos años.
En una conferencia en la Cámara de Comercio de Sabadell, el banquero ha explicado que 2012 ha sido para la banca como una "gran final", en la que se han sucedido hitos que han marcado el rumbo del sector, como la aprobación de los dos reales decretos del Gobierno obligando a las entidades a realizar grandes dotaciones, la petición de ayuda financiera a Europa, el resultado de los test de estrés de Oliver Wyman o la creación de la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb).
Todo ello se ha producido en un contexto de profundas reformas y de contracción del sector, un proceso de reestructuración que aún no ha finalizado y que se extenderá durante los próximos meses y años.
"De las 16 entidades que hay actualmente ya veremos cuántas quedarán", ha señalado ante los cerca de 200 asistentes que han llenado la sala de actos de la cámara sabadellense, donde la conferencia del presidente del Sabadell sobre perspectivas económicas se ha convertido en una cita anual.
Reducción de personal
Además, cree que un 15% de las oficinas bancarias que hay en la actualidad cerrarán y que la plantilla de los bancos se reducirá entre un 10 y un 15% adicional.
"El proceso de reconversión seguirá, pero está orientado en carriles perfectamente establecidos. Serán buenos o malos, pero al menos están", ha apuntado.
Oliu ha recordado que el Sabadell ha comprado en los últimos meses Banco CAM y la red de oficinas de Caixa Penedès en Cataluña y Aragón con el objetivo de reforzar su presencia en su comunidad de origen, donde era el sexto banco, por detrás de otros como CaixaBank, BBVA o Santander.
Ha querido dejar claro, no obstante, que el proyecto bancario del Sabadell "es un proyecto español, no catalán", y que aunque en España y Estados Unidos, donde también está presente, la entidad "aún tiene mucho trabajo que hacer", "posiblemente en un futuro", no sabe cuándo, el banco "empezará a mirar algún país emergente para diversificarse".
Botín: Va a haber menos competidores
