El consejo de administración anunciará en los próximos días los cambios.
Relevo en la Presidencia de FCC. A escasos días de que se celebre el consejo de administración de la compañía, Juan Béjar se postula ya como el primer ejecutivo de Grupo Fomento de Construcciones y Contratas en sustitución de Baldomero Falcones, primer ejecutivo del grupo durante los últimos cinco años. La única incógnita por resolver será saber quién ocupará el sillón presidencial.
No es la primera que vez que el grupo constructor, propiedad de Esther Koplowitz, muestra su confianza en el directivo y hasta ahora presidente de Portland Valderrivas, donde ha afrontado un fuerte proceso de reconversión, dada la situación del sector cementero, víctima indiscutible del ladrillazo español,
Quizás este difícil papel del que ha sabido salir ileso y las ganas de FCC (FCC.MC)de llegar más lejos son las causas que han llevado a la compañía a dar el paso. El exdirectivo de Ferrovial, Cintra y Citigroup, presidente de Globalvía y aún presidente de la cementera, tiene en su currículo avales suficientes para contar con el apoyo del consejo. De ahí que fuentes cercanas no consideren la operación de un golpe de efecto, sino de un relevo que llega justo en el momento adecuado y, sobre todo, muy complicado.
Béjar se va a encontrar un escenario con muchos frentes abiertos en el que se anuncia como un año muy oscuro para el sector de la construcción sin apenas licitaciones.
Según datos del Ministerio de Fomento, la contratación de la obra pública ha caído en más de un 70% y se han destruido más de un millón de empleos.
FCC se encuentra en pleno proceso de reestructuración por el descenso de los negocios tradicionales y que obligaron a la empresa a tomar la decisión de no pagar dividendo a cuenta de los resultados de 2012 debido, según un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, "a diversos factores que están provocando una contracción de los recursos generados por el Grupo y la necesidad de asumir pérdidas, como consecuencia del saneamiento de determinados activos de la compañía".
La noticia fue castigada en bolsa, tanto en cuanto el grupo venía de remunerar a sus accionistas con importantes sumas en los últimos cinco años. El dividendo bruto a cuenta de 2007 fue de 1,065 euros; en 2008, con la crisis llamando a la puerta, bajó a 0,785; el dividendo a cuenta de 2009 volvió a ser menor y bajó hasta 0,71 euros; a cuenta de 2010 se repitió la suma de 0,71 euros, y en 2011 el dividendo a cuenta cayó hasta los 0,65 euros.
Los problemas en casa se complican con un vencimiento de deuda para este año por valor de 1.600 millones de euros, lo que obliga a acelerar los procesos de desinversiones, entre los que figura la venta de Alpine Energie, por la que se habrían interesado Siemens y Alstom, así como la filial de energía.
Buenas relaciones
Pese a todo esto, Baldomero Falcones, de 66 años, y que en el último año ha asumido también la presidencia de Seopan, se va de la casa con nota alta por su "manera de ser" y "por su trabajo y esfuerzo".
Precisamente ayer se reunía con el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, el segundo organismo inversor en obra pública de la Administración después de Fomento. Tampoco hay que olvidar su buena relación con la ministra Ana Pastor, a la que no ha dudado en ponerle los deberes. Baldomero Falcones se incorporó en diciembre de 2007 a FCC como consejero delegado y, apenas seis meses después, asumió también la presidencia.
