
Iberdrola ha premiado la gestión de Ignacio Galán por alcanzar los objetivos de la empresa. El presidente de la eléctrica ha recibido excepcionalmente un 'premio' a su gestión de 10,15 millones de euros. En concreto, el máximo responsable de la eléctrica ha recibido 4,45 millones de retribución y además ha cobrado dos bonos.
Galán ha recibido 3,5 millones de euros por el éxito obtenido en el proceso de integración de Scottish Power y habría recibido alrededor de 2,2 millones por el cumplimiento del plan estratégico 2002-2006. Este último bono asciende en total a 8,2 millones de euros, pero se lo habrían repartido entre los dos ejecutivos que estuvieron al frente de la empresa entre los años 2002-2006, es decir, Ignacio Galán e Íñigo de Oriol.
Quedan pendientes pagos
Según el informe de gobierno corporativo en años anteriores se habían desembolsado 5,6 millones por lo que quedaban pendientes de pago otros 2,5 millones. Si tenemos en cuenta que Oriol estuvo tres meses del último año, la cantidad percibida por Galán podría rondar los 2,2 millones, aunque este extremo no estaría confirmado y dependería del reparto concreto del bonus.
El Consejo de Administración de Iberdrola analizó ayer la situación después de las elecciones del 9 de marzo para convocar su Junta General de Accionistas el próximo 17 de abril. Entre las propuestas que irán para su aprobación se incluye un sistema de retribución variable en acciones dirigido al presidente, Ignacio Sánchez Galán, y al personal directivo de la eléctrica que estará vinculado a la consecución de los objetivos del Plan Estratégico para el periodo 2008-2010, que se complementará en el caso de los directivos con un componente de entrega de una parte de su retribución variable anual en acciones.
Pagarés con el límite máximo
Los directivos de Iberdrola recibieron 3,1 millones como premio por la integración de Scottish Power. Por último, también se pedirá la delegación a favor del Consejo, y por un plazo de cinco años, de la facultad para emitir bonos u obligaciones simples y otros valores de renta fija (distintos de los pagarés), así como participaciones preferentes, con el límite máximo de 20.000 millones de euros, y de pagarés con el límite máximo, independiente del anterior, de 6.000 millones. Esto supone aumentar en 2.000 millones.
Además, la eléctrica alerta de algunos problemas que se podrían producir en caso de una opa. La compañía tiene 3.500 millones de dólares y 1.850 millones de euros en préstamos que estarían afectados salvo que se mantuviera la calificación crediticia de la empresa. Asimismo otros 1.000 millones de euros también tendrían problemas excepto que el cambio de propietario no se considerara perjudicial.
Una sociedad brasileña
Iberdrola además mantiene un contrato con la filial de EDP, Neoenergía, por el que se vería obligada a desprenderse del 39 por ciento en el capital de la sociedad brasileña llamada también Neoenergía a precio de mercado si un tercero comprase la eléctrica española. El presidente de Iberdrola también indica en el informe de gobierno corporativo que no tiene acciones de Iberdrola Renovables, la filial que salió a Bolsa durante este año pasado y que acumula minusvalías en este momento desde su precio de salida.
La eléctrica propone también un incremento del 5,2 por ciento del pago complementario del dividendo con cargo a los beneficios de 2007, que ascenderá a 0,156 €brutos por acción. El órgano de administración abonará además una prima de asistencia a dicha Junta General, como ya hiciera el año pasado, de 0,005 por título.
Cabe destacar que, en línea con el crecimiento del beneficio neto en 2007 (del 41,8 por ciento, hasta 2.353,7 millones de euros), la compañía ha aumentado un 44 por ciento el montante en concepto de dividendo total con cargo a los resultados del año pasado, hasta alcanzar una cifra de 1.353 millones de euros.