
La situación financiera de Worten, la cadena de tiendas de informática y pequeños electrodomésticos propiedad del grupo portugués Sonae, se está complicando en España. La compañía cerró el último ejercicio con unas pérdidas de 27 millones de euros, lo que supone un 70% más que las registradas un año antes. En 2011 se abrieron un total de 14 establecimientos, lo que permitió incrementar las ventas un 27%, hasta 229 millones de euros, pero eso a costa de incrementar considerablemente los números rojos.
Para la empresa, lo peor además es que Deloitte, la firma que se ha encargado de auditar sus cuentas, ha puesto varias pegas a las mismas. Durante los ejercicios 2009, 2010 y 2011, Sonae concedió préstamos participativos a Worten España, y ésta procedió a registarlos como parte de su patrimonio neto, cuando, según recuerda el auditor, la ley obliga a que se clasifique como deuda.
Las pegas de Deloitte
"En consecuencia, se encuentran sobrevalorados e infravalorados en aproximadamente 69 millones de euros los epígrafes del patrimonio neto y de deuda con empresas del grupo y entidades vinculadas a largo plazo", señala el auditor. Lo más grave es que era algo que ocurría ya en 2010 -el importe entonces era de 38 millones- y que Worten no sólo no ha corregido sino que además ha incumplido aún más.
Asimismo, Deloitte asegura también que "la sociedad no ha tenido en cuenta en la valoración de sus existencias el efecto de algunos descuentos comerciales recibidos de ciertos proveedores", por lo que las pérdidas se incrementarían en 2,4 millones.
Worten contaba al cierre de 2011 con 38 establecimientos y tenía prevista la apertura este año de otros 12 más. El plan de negocio de Sonae contempla que la sociedad seguirá incurriendo en pérdidas a medio plazo, hasta alcanzar un volumen de actividad suficiente. El problema es que, aunque el grupo ha manifestado su intención de seguir prestando apoyo financiero a la compañía, Deloitte avisa de que "su capacidad para realizar sus activos y hacer frente a los pasivos (...) está sujeto a la obtención de resultados positivos en el futuro en función del cumplimiento del plan y la evolución del mercado".