La Comisión Europea sopesa encomendar a organismos públicos -como el Banco Central Europeo (BCE) o las oficinas estadísticas nacionales- la elaboración de índices de referencia para el sector financiero. Se trata de evitar que se repitan escándalos como el de la manipulación del Libor por parte de las grandes entidades, que ya ha costado una multa a Barclays.
Bruselas considera que "las instituciones públicas podrían estar mejor situadas" que el sector financiero "para abordar conflictos de interés" y "podrían tener el mejor acceso a los datos subyacentes necesarios" para elaborar estos índices.
"Teniendo en cuenta estos factores, debería considerarse si algunos índices importantes -y cuáles- deben ser proporcionados por organismos públicos, o si los organismos públicos deben supervisar de cerca su cálculo, suministro y gobernanza", señala el Ejecutivo comunitario en un documento de consulta.