Caixabank y Carlos Slim han decidido dar un nuevo impulso a su alianza en el banco mexicano Inbursa. Los dos socios han acordado que hasta final de año abrirán 50 nuevas oficinas, de forma que la red de Inbursa pasará de los 274 locales de julio a unos 320. Este nuevo impulso es esencial para lograr el objetivo que se fijaron cuando Caixabank compró el 20 por ciento de Inbursa en 2008 y se propusieron alcanzar las 500 oficinas en 2014.
Fuentes de Caixabank descartaron ayer que se hayan acelerado las aperturas ya que "van según las previsiones". El anuncio de las aperturas lo realizó ayer el subsecretario de Hacienda y Crédito Público de México, Gerardo Rodríguez. En su opinión, Caixabank e Inbursa son "dos empresas muy sólidas con un gran potencial de crecimiento".
Inbursa es el brazo financiero del magnate Carlos Slim. Antes de aliarse con Caixabank en 2008, estaba especializado en banca mayorista y vendía sus productos principalmente a través de agentes en vez de sucursales. La alianza preveía transformar la red comercial y recrear la estructura de oficinas de La Caixa para acercar a clientes minoristas.
