Deoleo, fabricante de las marcas Carbonell y Koipe, cerró el primer semestre del año con unas pérdidas netas de 4,2 millones de euros, un 36% inferiores a los 'números rojos' de 6,5 millones del mismo periodo del pasado ejercicio, según informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La alimentaria explicó que el resultado quedó lastrado por los efectos de un acta de inspección fiscal en las empresas del grupo en Italia por valor de 7,1 millones de euros. Excluyendo esta circunstancia, el grupo hubiera obtenido un beneficio de 2,9 millones de euros.
La facturación se situó en 399,3 millones de euros, lo que representa un descenso del 14% debido a la bajada del precio de la materia prima y a la reducción del peso de la marca blanca "con el objetivo de buscar la máxima rentabilidad".
El resultado bruto de explotación (Ebitda) mejoró un 38,3%, hasta 38,1 millones de euros, y el margen de Ebitda sobre ventas pasó del 5,9% al 9,5%, lo que refleja, según el grupo, que la nueva estrategia de gestión basada en "más eficiencia, más valor añadido y apoyo a las marcas" está teniendo los efectos esperados en la rentabilidad del negocio.