El presidente de Enagás, Antonio Llardén, ha afirmado que en la empresa será "bienvenido" cualquier inversor, "especialmente si es un inversor internacional que atrae capital a España". No obstante, ha recordado que existen algunas "limitaciones".
El responsable de Enagás ha realizado estas declaraciones en Bilbao, donde ha participado en el encuentro Forum Europa-Tribuna Euskadi y se ha referido a algunas informaciones que apuntan a que el grupo estatal chino State Gride podría estar interesado en adquirir Enagás y Red Eléctrica Española.
Llardén ha recordado que la legislación española, en el caso de Enagás, impide que ningún accionista tenga más del 5% de las acciones. Además, ha añadido, en referencia a la citada información sobre la empresa china, que, "siempre darán la bienvenida, a accionistas institucionales o no institucionales".
"Daremos la siempre bienvenida a cualquier accionista institucional con un único matiz y es que la legislación europea probablemente pondría dificultades a que un operador energético estuviera en el 5%, dependería de si actúa en Europa o no actúa. En cambio, un fondo de inversión chino o un fondo soberano chino no tendría el más mínimo problema", ha indicado Llardén.
"Bienvenido cualquier inversor, especialmente si es un inversor internacional que atrae capital a España y las únicas limitaciones son las del 5% y las que impone la UE", ha indicado Llardén, que ha señalado que no hay que tener "miedo" al capital extranjero.
La participación de la SEPI
Respecto a si prevén que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) se desprenda de su participación en Enagás, ha manifestado que es una cuestión que dependerá de ellos y que desconocen sus planes, pero están "muy contentos teniendo a la SEPI dentro de nuestro accionariado".
Llardén ha añadido, en todo caso, que existe "experiencia positiva" de accionistas institucionales que vendieron sus participaciones y "nunca se ha tenido ningún problema".
"La empresa tiene un buen nombre en el mercado internacional y es, por eso, que, en estos momentos, tenemos un 65 o casi 70% de accionistas extranjeros. Hace cinco años y medio teníamos un 37%, por lo tanto, si en algún momento, algún accionista tiene que vender su participación la venderá en el mercado, sin ningún problema", ha asegurado.
Por otra parte, ha señalado que ninguna de las cajas presentes en Enagás les ha comunicado su intención de desinvertir en la empresa, sino "al contrario". "Nos han comentado que consideran que es una buena inversión, especialmente en estos momentos de crisis", ha agregado.
Conexión Francia
Respecto a la conexión de la red gasística con Francia, ha indicado que se ha avanzado "mucho" en la interconexión con Francia y, en la actualidad, la que existe es en Larrau, por el pirineo navarro con una capacidad de 2,5 bcm/año. Según ha manifestado, en los últimos años se han alcanzado tres acuerdos, por una parte, doblar la capacidad de Larrau y que sea dirección Norte-Sur y Sur-Norte, lo que confía en que estará concluido en 2013.
También se plantea hacer una conexión a través de Irún con Biriatou que llegue a tener en los dos sentidos una capacidad de 1,5 bcm. La tercera pata sería un gaseóducto que completaría todo el eje mediterráneo. Al respecto, ha precisado que está previsto el eje Martorell-Barcelona-Figueras, que se dividió en dos tramos, el primero de ellos en construcción, que llega a Hostalric y estará concluido a finales de este año.
Llardén ha añadido que estaría pendiente el segundo tramo, de alrededor de 50 kilómetros (Hostalric-Figueras) y, aunque está el proyecto hecho, está "por el momento congelado por razones de ahorro".
El responsable de Enagás ha indicado que, al hablar de interconexiones, se necesitan "estas tres patas" y confía en que el cambio de Gobierno en Francia "pueda ayudar" a facilitar todo el sistema de interconexión con el país galo. "Soy razonablemente optimista en que lo podremos terminar con Francia, con la ayuda de la UE", ha indicado Llardén, que ha señalado que es un tema "estratégico" que no sólo interesa a España para que la Europa central no tenga que depender sólo del gas ruso.
En general, Llardén ha destacado la importancia de la interconexiones internacionales y ha añadido que, si se lograrán aumentar, España podría ser "una pista de aterrizaje de gas natural, que podría ir hacia Europa".