Barcelona, 3 mar (EFECOM).- El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, ha afirmado hoy que la huelga que mantienen los conductores de autobuses "no aporta ninguna fuerza negociadora, sino todo lo contrario", y que es una acción que va en contra de los ciudadanos.
En unas declaraciones a la prensa en el Museo Picasso, al que ha acudido a la presentación de las nuevas adquisiciones, Hereu ha valorado positivamente que se respeten los servicios mínimos establecidos por la Generalitat porque con ellos se defiende a los ciudadanos que necesitan del transporte público.
Tras asegurar que esta movilización tiene un planteamiento equivocado, Hereu ha insistido en que esta propuesta ha sido unilateral de unos sindicatos que han querido radicalizar un conflicto "que no sirve para nada".
También ha hecho un llamamiento para que la empresa y los sindicatos se sienten a negociar, y ha apelado a la racionalidad argumentando que lo que no se puede defender es un incremento de la masa salarial inasumible del 20% y una reducción de la jornada de 285 horas anuales.
En las declaraciones, Hereu ha insistido en que hay que encontrar interlocutores de la mayoría de los trabajadores y hablar sobre sus reivindicaciones, pero en el marco de un convenio colectivo. EFECOM
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