San Sebastián, 4 jul (EFECOM).- El director de la Unidad de Investigación Marina del Instituto pesquero Azti, Lorenzo Motos, abogó hoy por cerrar la pesquería de la anchoa por un "periodo no menor a un año" para ver si se recupera la especie en el Golfo de Vizcaya.
Motos, quien intervino en San Sebastián en un curso de verano de la Universidad del País Vasco, argumentó que debido a que hay factores ambientales sobre los que no se puede actuar de modo inmediato, "lo único" que se puede hacer es "parar la actividad pesquera hasta que se vea que se ha recuperado el stock" y no sólo hasta el 31 de diciembre, como decidió ayer hacer por segundo año consecutivo la Comisión Europea en el Golfo de Vizcaya.
"Cada anchoa que quitemos de la mar va a suponer una menor capacidad reproductiva y menores posibilidades de un buen reclutamiento, de una buena generación de anchoa joven que pueda recuperar el stock", alertó.
El responsable de Azti indicó que en los últimos cinco años no ha habido un incremento de la población de anchoa, subrayó que los científicos llevan tres años pidiendo el cierre de esta pesquería y denunció que el Consejo de Ministros europeo decida "cada mes de diciembre" abrir el caladero "cuando se ve claramente" que no hay anchoa suficiente.
"Sí puede recuperarse, pero estamos haciendo todo, desde el punto de vista de gestión, para que no se recupere", aseveró Motos, quien expresó su temor de que la situación de la población de anchoa sea "irreversible" o difícilmente corregible.
Tras considerar que la población de anchoa ha podido verse mermada por un "efecto combinado" de factores ambientales y de capturas, aconsejó suspender la pesca ante la imposibilidad de actuar en los fenómenos ambientales.
"Puede haber un momento en el que el ambiente no sea capaz de generar grandes reclutamientos de la especie, pero si sumamos el efecto de la pesca, el stock tendrá cada vez menos capacidad reproductiva. Puede llegar a un nivel en el que hagamos un serio daño, incluso irreversible", concluyó. EFECOM
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