
Algunas de las principales eléctricas europeas han hecho un ajuste contable en sus cuentas en 2011 que han permitido impulsar sus resultados e incluso en algunos casos salvar sus balances tras un mal año. Se trata una prolongación de la vida útil de los parques eólicos de 20 años a 25 años, lo que permite a su vez ampliar el periodo de amortización y por ende unos ingresos extras.
En concreto, EDF Energies Nouvelles, NextEra (la antigua Florida Power) hicieron este cambio contable a mediados del pasado año, creando así una tendencia que ha sido continuada por compañías líderes en energía eólica en España, como son Iberdrola y EDP Renováveis, a quienes previsiblemente seguirán otros grupos por las ventajas contables que tiene este ajuste.
En concreto, Iberdrola incluyó este cambio desde el 1 de julio de 2011, tal como aparece en su informe trimestral de los resultados completos del último ejercicio y ha cuantificado este efecto con 66 millones de euros debido a la menor amortización.
Hasta los 30 años
Es destacable cómo ha influido este cambio en EDP Renováveis. Según explicaron fuentes de la compañía a elEconomista, el grupo ha ingresado 55 millones de euros en 2011 como consecuencia de ampliar la vida útil de sus parques. Con esta modificación, la compañía ha conseguido salvar sus cuentas ya que su beneficio el pasado año ascendió a 89 millones de euros, gracias sobre todo al ajuste contable sobre la eólica.
Según las mismas fuentes, la compañía cuenta con estudios que avalan alargar la vida útil de sus instalaciones eólicas hasta los 30 años, aunque de momento EDP ha preferido fijar la amortización en 25 años y de momento no se plantea un nuevo horizonte.
En este sentido, cabe destacar que la principal compañía eólica de Estados Unidos, NextEra (ex-Florida Power), ya ha elevado ya dicho periodo de tiempo hasta los 30 años.
Por su parte, Iberdrola ha alargado la vida útil de 13.300 megavatios eólicos instalados en todo el mundo. Para adoptar esta decisión, la compañía ha tenido que elaborar una serie de informes técnicos que respaldan que este tipo de instalaciones puede alcanzar sin problemas dicho periodo de actividad.
Asimismo, este criterio ha sido avalado, como es pertinente, por el auditor de cuentas de Iberdrola, Ernst & Young.
Por otro lado, según las cuentas de Enel Green Power la vida útil de sus parques para cada una de las instalaciones oscila entre los 15 y los 40 años.
En cualquier caso, el parque de generación eólica en España es muy joven porque tan sólo 15 megavatios han cumplido ya los 20 años de vida útil. Sin embargo, a lo largo de esta década serán ya varios más lo que llegarán a su fin si no se amplia el plazo, como en la actualidad lo están haciendo países de Europa como Dinamarca.
Primero fueron las nucleares
Así, estos cambios liderados por las principales compañías hacen prever una senda a seguir por el resto de operadores. Una tendencia similar ocurrió cuando en 2004, Iberdrola y después otras eléctricas modificaron el periodo de amortización de las centrales nucleares de 30 a 40 años.
Fue un momento donde estas instalaciones contaban con una estructura financiera que suponía que el 70% de los costes se aplicaban a la amortización de la inversión inicial (incluidos los costes financieros), lo que cambió totalmente las previsiones de las principales compañías.
En estos momentos, el Gobierno baraja ampliar la vida útil de las nucleares, lo que afectaría de nuevo positivamente a estas compañías ya se prolongarían hasta los 60 años desde los 40 años fijados en la actualidad. Eso sí, el Ejecutivo quiere, por contra, aplicar una nueva tasa a esta tecnología.