Burgos. 14 feb (EFECOM).- Caja de Burgos obtuvo en 2007 unos beneficios netos de 109 millones, lo que supone un incremento del 2,2 por ciento, y ante la crisis económica y los problemas de liquidez del sector financiero ha destinado para el próximo año 73 millones de euros como provisiones para insolvencias.
El director general de la Caja, Leoncio García, explicó hoy que esta importante cantidad de dinero para futuras insolvencias se hace previendo pérdidas futuras derivadas de un aumento de la morosidad.
Este aumento, según ha precisado, se observa sobre todo en los créditos a los compradores de viviendas y todavía no se ha traducido en un porcentaje importante en el sector de los promotores constructores, aunque las previsiones de futuro obligan a recortar la financiación del sector.
Según los responsables de la entidad, el declive de la actividad inmobiliaria ha determinado un incipiente aumento del nivel de morosidad, cuyo índice en 2007 ha registrado un avance de 0,16 puntos, hasta situarse en el 0,77 por ciento.
El director general ha reconocido, a preguntas de los periodistas, que la crisis económica, derivada de una falta de liquidez en los mercados financieros es "importante", y es la causa de que el plan de expansión de Caja de Burgos sea más modesto para 2008, con la apertura de siete nuevas sucursales frente a las 23 del ejercicio anterior.
Leoncio García ha precisado que la crisis que se padece es "nueva" e "importante" y ha destacado que "en el grupo de los optimistas ya no queda nadie" para agregar que permanecerá todo el próximo año.
Esta crisis lleva a los gestores de la Caja a la "prudencia" y por ello se ha hecho una provisión de fondos para insolvencias de 73 millones, de ellos 32 millones de forma voluntaria, siendo mucho mayor de la legalmente establecida.
Tanto el presidente de la entidad, José María Arribas, como el director general han calificado de "magníficos" los resultados económicos de 2007 atribuibles a la buena coyuntura económica del primer semestre del año y a la eficiencia en la gestión.
Para 2008 Caja de Burgos destinará 30 millones de euros para la obra social, que tendrá como principales objetivos la programación del centro Cultural Cordón, el apoyo a las entidades locales y no lucrativas y la apuesta por el medio ambiente. EFECOM
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(Con fotografía)
