El presidente de Kazajistán, Nursultan Nzarbáyev, ha inaugurado la nueva fábrica de Talgo en la capital de país, Astaná, según ha informado la empresa ferroviaria en un comunicado.
Esta apertura supone la "consolidación" de la estrategia de internacionalización de la compañía española y permitirá a Talgo renovar progresivamente la flota de coches de pasajeros de alta velocidad en Kazajistán gracias al contrato que firmó en noviembre de 2010 con el país centroasiático, por el que construirá 420 nuevos coches por un importe de 300 millones de euros.
El proyecto se ha llevado a cabo mediante la asociación de la firma española con Ferrocarriles Kazajos, de la que nació la empresa mixta Tulpar Talgo, cuya fábrica en Astaná cuenta con una superficie de 31.000 metros cuadrados y una capacidad para fabricar 150 coches al año.