ENDESA
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Los flecos sueltos de la opa de Endesa están a punto de ser cortados y buena prueba de ello es que los alemanes de E.ON se reunían ayer con los representantes de Enel y Acciona para ultimar el traspaso de activos a los de Wulf Bernotat, según lo acordado hace ya casi un año a cambio de que la germana se retirase de la carrera por Endesa.
La reunión, convocada en el despacho de abogados Pérez Llorca en Madrid, tuvo como objeto acercar posiciones, aunque, según fuentes consultadas por elEconomista, el apretón de manos final todavía se hará esperar otras dos o tres semanas.
Su trozo de pastel
De este modo, ayer intentaron acercarse a un acuerdo definitivo con el que cerrar el traspaso de activos, algo especialmente relevante si se tiene en cuenta que la valoración de este trozo del pastel de Endesa (ELE.MC) no era la misma de un lado y de otro. Hace unos meses, directivos de la italiana fijaban el precio del paquete en torno a los 13.000 millones de euros, una cifra notablemente superior a la que había barajado E.ON <:EOA.XE:>, en torno a los 10.000 millones.
Sin embargo, cumplido casi medio año de la toma de control por el tándem hispanoitaliano ya es hora de poner las cosas claras y finiquitar el asunto. De hecho, hay que recordar que el propio Fulvio Conti, consejero delegado de la italiana, dejaba claro hace unas semanas en el Foro de Davos que la venta de activos a los alemanes se cerraría en las próximas semanas.
Concretamente, el trozo que se llevará la eléctrica germana incluye, además de la filial española de Enel (ENEL.IT), Viesgo, una serie de centrales de Endesa ubicadas dentro de la Península Ibérica y gran parte de los negocios europeos de la eléctrica entre los que no se incluyen, por ejemplo, los activos griegos que controlan a través de Endesa Hellas.
