París, 4 feb (EFECOM).- El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se desplazó hoy a la fábrica que el grupo siderúrgico Arcelor Mittal tiene en Gandrange, al noreste del país, para decir que está dispuesto a dar ayudas públicas para mantener la actividad en la planta, objeto de un plan de reestructuración.
Sarkozy aseguró que "estamos dispuestos a hacer lo necesario, sea cual sea el propietario, porque nuestro objetivo es mantener fábricas abiertas en Francia porque un país que deja de tener fábricas es un país que deja de tener economía", ante varios cientos de trabajadores de Gandrange.
Señaló que la primera opción sería convencer al presidente de la compañía, Lakshmi Mittal, para que renuncie al plan social, que prevé suprimir 596 de los 1.108 empleos de la planta, y en ese caso "invertiremos con él".
En caso contrario, "encontraremos un comprador e invertiremos con él, añadió Sarkozy, que iba acompañado del ministro de Trabajo, Xavier Bertrand, en su visita.
Las ayudas públicas podrían llegar en forma de inversiones en maquinaria, pero también en la formación de los 300 jóvenes contratados en los dos últimos años por la compañía en Gandrange.
Mittal había aceptado, en un encuentro mantenido con Sarkozy la semana pasada en París, congelar el plan de reestructuración de esta acería hasta abril, para examinar un contra-proyecto industrial y social que los sindicatos han encargado a un gabinete especializado.
El jefe del Estado indicó que prefería poner dinero para mantener en funcionamiento la fábrica en lugar de "para que la gente se quede en casa con prejubilaciones o en el paro". EFECOM
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