Ourense, 25 ene (EFECOM).- El nuevo trazado del Ministerio de Fomento para la llegada del Ave a la ciudad de Ourense dejará sin circulación ferroviaria la zona urbana, por lo que quedarán libres 250.000 metros cuadrados de terreno en varios barrios de la ciudad, propiedad de Renfe, explicó hoy el alcalde Francisco Rodríguez.
En rueda de prensa posterior a la reunión con los portavoces del PP y del BNG del Ayuntamiento, el regidor explicó que tras la noticia del nuevo trazado conocida ayer "ahora habría que empezar a trabajar en los convenios con Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para que el desarrollo de los solares se autofinancie".
En ese sentido, señaló que la mayor parte del suelo que es propiedad de Adif está en el entorno de la estación Empalme, ya que sus instalaciones, edificios y vías ocupan 143.000 metros cuadrados, mientras que otros 23.000 corresponden al barrio de San Francisco -donde hay un apeadero- y otros 5.000 al barrio de O Vinteún, donde hay edificios de antiguos talleres.
Según explicó, el suelo liberado precisará una recalificación a cargo del Ayuntamiento para que los constructores puedan darle uso teniendo en cuenta que la Ley les obliga a ceder el 40 por ciento para dotaciones y usos públicos.
Rodríguez explicó que el nuevo trazado supondrá además la construcción de siete kilómetros de vía para el Ave y el tren convencional, por fuera de la ciudad, de los que cinco serán de túneles y el resto discurrirá por un viaducto y por la superficie.
"La próxima semana, Fomento enviará un esquema del nuevo trazado que ahora precisa la declaración de impacto medioambiental y luego su exposición para información pública", añadió.
Recordó que el anterior trazado, coincidente con la actual vía convencional que discurre por el medio de seis barrios de la ciudad, tendría un coste estimado en 60 millones de euros "pero el actual costará cuatro veces más y se estima en los 250 millones de euros, por lo que estamos ante un gran proyecto para Ourense", precisó.
Rodríguez indicó que es el momento "de empezar a soñar" y pensar en qué uso se dará al gran corredor que hoy ocupan las vías entre los barrios de Seixalbo y A Ponte. EFECOM
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