La firma de lujo italiana registró en los seis primeros meses de su ejercicio fiscal un beneficio neto de 179,5 millones de euros, lo que supone un incremento del 74% con respecto a lo que obtuvo en el mismo periodo del año anterior. La cantidad supera las previsiones realizadas por la propia compañía, que esperaba ganar unos 150 millones de euros.
Según ha explicado en un comunicado, la fuerte demanda registrada en la zona de Asia-Pacífico ha impulsado su resultado, después de abrir 26 nuevas tiendas en la región durante dicho periodo.
Sin contar Japón, las ventas en estos países repuntaron un 35% hasta 368 millones de euros. Los ingresos totales aumentaron el 21% hasta 1.100 millones de euros. De las distintas marcas que agrupa Prada, Miu Miu es la que creció con mayor intensidad, al registrar unas ventas de 199 millones de euros, un 25% más.
"Asia es nuestro mercado número 1", destacó el vicepresidente de Prada, Carlo Mazzi, quien señaló que la confianza del grupo en el futuro del mercado asiático es "muy fuerte". En este sentido, para el presente ejercicio planean abrir otros 35 establecimientos, mientras que en los próximos tres años pretende inaugurar unos 80 outlets al año, de los que 25 serán en Asia.