Empresas y finanzas

La gran banca europea cuenta con más de medio billón en deuda de países periféricos

El castigo del mercado, sobre todo, a la banca francesa en los últimos días sólo se explica por el efecto contagio que pudiera tener en la deuda soberana de otros países de la zona euro. Fuentes del sector sostienen que el varapalo de los inversores y la incertidumbre sobre su situación no obedece sólo a la más que probable reestructuración de los bonos griegos, ya que el impacto sobre los balances de las entidades galas supondría un deterioro de menos de un 1 por ciento de su balance. Eso, sin contar que hayan realizado provisiones especiales para cubrir una eventual quita en los intereses a percibir.

Sólo los grandes bancos franceses, alemanes, británicos, españoles e italianos cuentan con más de 550.000 millones de euros de bonos de estados en problemas.

De confirmarse los peores presagios, no sólo las entidades francesas soportarían elevadas pérdidas. La mayor parte de los principales bancos europeos se verían envueltos en una espiral de números rojos que, en algunos casos, conllevaría quiebras. Ya lo advirtió hace una semana el presidente del alemán Deutsche Bank. Josef Ackermann admitió que un ajuste del valor en la cartera de deuda soberana supondría la desaparición de más de una entidad en Europa.

Las advertencias del FMI

La confesión del banquero germano se producía días después de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) alertara de que el sistema financiero del Viejo Continente necesitaba unos 200.000 millones para recapitalizarse por el efecto de la deuda soberana.

Las cifra era provisional y no tenía en cuenta la dotación que las entidades ya han efectuado para hacer frente a posibles descensos del valor o reestructuraciones, principalmente en los países con más dificultades, Grecia, Portugal, España, Irlanda e Italia.

En Grecia el problema lo tienen, sobre todo, los mayores bancos de Francia y Alemania. Los españoles tienen bonos por un valor cercano a los 400 millones. En los últimos meses, algunas entidades han reducido su exposición por el vencimiento de estos productos. Es el caso del Pastor, que a cierre de 2010 contaba con un riesgo de 44 millones y en la actualidad es de apenas 3 millones.

¿Pero qué ocurriría si es otro Estado el que en un futuro ve comprometido el pago de sus deudas? En el caso de España, el riesgo se concentra en su mayor parte en los grupos financieros nacionales, que soportan casi la mitad de la deuda total. Los principales bancos alemanes aparecen en segundo lugar. Si bien, el conjunto del sector francés tiene más bonos soberanos en su balance que el germano.

Al igual que en el caso español, los bancos italianos son los más expuestos a la deuda de su país.

En el club de los cinco estados periféricos, son las grandes entidades alemanas las que tienen un volumen de bonos superior si se descuentan los del territorio de origen (España e Italia), con un importe de casi 70.000 millones. Los británicos son los que menos han arriesgado, con unos 22.000 millones en su cartera de renta fija.

El riesgo de los españoles es también pequeño si se excluyen del cómputo nuestros propios bonos. Tan sólo la exposición es algo significativa en Portugal, debido sobre todo a la inversión realizada por el Santander y el Popular, dos de las entidades con una presencia significativa en el mercado financiero luso.

Algunos analistas, no obstante, se han sorprendido por el volumen de deuda que soporta BBVA en Italia, el estado más cuestionado en los últimos meses al margen de Grecia. La entidad tiene invertidos más de 3.000 millones en el país transalpino y su actividad en este mercado es prácticamente insignificante.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky