Londres, 21 dic (EFECOM).- Los trabajadores de la gestora de aeropuertos BAA, propiedad del grupo español Ferrovial, han convocado tres huelgas en enero en siete de los aeropuertos más importantes del Reino Unido para protestar contra la modificación del actual plan de pensiones para los nuevos empleados.
Con 1.956 votos a favor y 1.108 en contra, los empleados de BBA afiliados al sindicato Unite concluyeron su reunión de hoy con la decisión de empezar los paros el 7 de enero con una huelga de 24 horas, seguida de otra también de 24 horas prevista para el 14 y una tercera de 48 horas convocada el 17 del mismo mes.
El sindicato, que llegó a amenazar con empezar sus movilizaciones el 28 de diciembre, decidió finalmente postergar para después de Navidades las huelgas, tras la votación de miles de trabajadores de seguridad, mantenimiento, administración y personal de oficina.
La acción persigue denunciar la decisión de BBA de reducir las ventajas del plan de pensiones para los trabajadores que contrate la empresa a partir de diciembre de este año.
Según la medida, los nuevos contratados no podrán calcular su pensión al jubilarse de acuerdo con su último salario anual, una medida de la que se benefician hasta ahora los trabajadores de la gestora.
Unite pide que Ferrovial utilice parte del dinero con el que BAA contribuye a sus beneficios (808,8 millones de euros en los primeros nueve meses del año) para financiar las pensiones.
El delegado sindical de Unite, Brendan Gold, culpó hoy a Ferrovial de las medidas anunciadas hoy y advirtió de que las huelgas pueden derivar en el cierre de los siete aeropuertos.
"No se trata de una decisión (la de modificar el plan de pensiones) tomada por la dirección (de BAA), sino que es una medida decidida en España que no creo que cuente con el respaldo del equipo de gestores del Reino Unido", aseguró Gold.
El delegado admitió que la medida tomada por su sindicato causará "un gran desbarajuste" a los viajeros, por lo que acusó a BAA de no hacer lo "suficiente" para resolver el conflicto.
"Me asombró y sorprendió la forma en que BAA rechazó afrontar este asunto. BAA ha tenido unos beneficios de 500 millones de libras (casi 700 millones de euros) y sus dueños españoles han visto crecer sus ganancias en un 60 por ciento", añadió Gold.
Según el responsable sindical, la compañía ha dejado a los trabajadores "sin ninguna otra opción" que la de llevar a cabo una acción industrial para "defender" sus intereses.
Sin embargo, Gold dijo que los trabajadores están dispuestos a sentarse con BAA para discutir el plan de pensiones, pero sólo después de que el grupo dé marcha atrás en su decisión de cerrar las puertas a los nuevos empleados.
La medida se conoció un día después de que el personal de cabina de la aerolínea británica Virgin Atlantic, que opera desde el Reino Unido a destinos como EEUU o el Caribe, aprobara la convocatoria de dos parones de 48 horas a partir de los próximos 9 y 18 de enero. EFECOM
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