SANTANDER (Reuters) - Las dos mayores organizaciones sindicales españolas, UGT y CCOO, descartaron el martes convocar una huelga general, ya que la última convocatoria de este tipo no ha tenido los efectos deseados de introducir cambios en la política del Gobierno sobre reformas en materia laboral.
"A la vista está que los efectos en su traslación al cambio de las políticas no están (...) ahora hemos decidido canalizar la respuesta a la reforma laboral por medio de una iniciativa legislativa popular", dijo el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, en un curso en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), y añadió que han recogido más de un millón de firmas en contra y que van a presentarlas al Parlamento.
Pese a las fuertes críticas realizadas a la nueva legislación en materia de negociación colectiva, a la que incluso tacharon de inconstitucional, el líder sindical destacó también que la reforma de los convenios tiene unos efectos a más largo plazo que la reforma laboral y, por lo tanto, la respuesta de los sindicatos tienen que ser también con una mayor dilación temporal.
"La reforma de la negociación colectiva tiene un recorrido distinto, yo creo que este país tiene que ahorrarse un escenario de conflicto (...) la negociación colectiva es distinta a la reforma laboral, los efectos se sienten más en el tiempo (...) por eso la forma de actuar va a ser más a lo largo del tiempo, pero yo no descarto absolutamente ningún escenario", dijo Toxo preguntado por una eventual convocatoria de una huelga general.
Tras la aprobación de la reforma laboral que modificaba los métodos de contratación en España, en septiembre del pasado año los sindicatos mayoritarios convocaron una huelga general que, según analistas, tuvo una escasa repercusión entre los trabajadores no relacionados directamente con sindicatos.