
La cadena de tiendas de electrodomésticos Miró ha anunciado a los sindicatos su intención de presentar concurso voluntario de acreedores para poder hacer frente a las deudas que acumula por la crisis y la caída del consumo.
La dirección de la empresa, ubicada en Martorell, se ha comprometido a no cerrar ninguna de las 150 tiendas que tiene actualmente repartidas por toda España, según ha explicado a Efe el presidente del comité de empresa (UGT), Aitor Ballabriga. Miró cuenta con unos 1.500 trabajadores en todo el país.
La compañía fundada en Martorell (Barcelona) en los años 70 ha optado por el concurso para asegurar su viabilidad y negociar mejor con los acreedores, según los sindicatos.
Ballabriga explica que la dirección de la cadena se ha reunido con los sindicatos para explicarles la situación. "La noticia es preocupante porque afecta a todos los empleados y genera incertidumbre, pero es positiva dentro de lo que cabe porque no supone la reducción de empleo", ha señalado.