Los rebeldes libios avanzan y Rusia critica los bombardeos

BIN JAWAD, Libia (Reuters) - Los rebeldes libios avanzaban hacia la población natal del líder libio Muamar Gadafi, dirigiéndose hacia el oeste por la carretera costera en camionetas y cargados con ametralladoras.

Rusia criticó los ataques aéreos occidentales que han cambiado el rumbo del conflicto libio, diciendo que eran comparables a tomar partido en una guerra civil y que incumplían los términos de una resolución de Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

Qatar se convirtió en el primer país árabe que reconoce a los rebeldes - que entran en su sexta semana de insurrección contra los 41 años de gobierno de Gadafi - como únicos representantes legítimos del pueblo libio.

Al Yazira dijo que los rebeldes habían tomado la población de Naufaliya de manos de fuerzas leales a Gadafi, ampliando su avance hacia el oeste camino de Sirte, población natal del líder libio, a unos 120 km de distancia.

Alentados por la ayuda de los ataques aéreos, los rebeldes rápidamente revertieron las pérdidas militares anteriores y recuperaron el control de las principales terminales petroleras del este de Libia, país miembro de la OPEP.

"Queremos ir a Sirte hoy. No sabemos si podremos", dijo el combatiente rebelde Marjai Aguri, de 25 años, mientras esperaba junto a otras 100 personas a las afueras de Bin Jawad con tres lanzacohetes múltiples, seis armas antiaéreas y alrededor de una decena de camiones con ametralladoras.

Un corresponsal de Reuters que estaba a unos 15 km al oeste de Bin Jawad en la carretera a Naufaliya escuchó un bombardeo constante más adelante en el camino.

"Este es el frente. El Ejército se ha parado allí, nosotros paramos aquí", dijo a Reuters Mohammed al-Turki, de 21 años, un combatiente en un control rebelde, señalando la carretera desde donde se escuchaba el sonido de las explosiones.

Los ataques aéreos occidentales comentaron el 19 de marzo, dos días después de que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas autorizara "todas las medidas necesarias" para proteger a los civiles de las fuerzas de Gadafi. Pero desde el principio, la misión ha afrontado críticas sobre su alcance y objetivo, incluyendo hasta qué punto se va a respaldar activamente a los rebeldes y si el propio Gadafi es un objetivo.

Rusia, que se abstuvo en la votación de la ONU, dijo que los ataques occidentales contra las fuerzas de Gadafi equivale a tomar parte con los rebeldes.

"Consideramos que la intervención de la coalición en lo que esencialmente es una guerra civil interna no está sancionada por la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU", dijo el ministro de Exteriores Sergei Lavrov en rueda de prensa.

Se prevé que la compañía petrolera rusa Tatneft reserve 100 millones de dólares en pérdidas en inversión de capital en Libia como resultado del conflicto, dijo una fuente de la compañía a Reuters.

El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen dijo a la BBC: "Estamos allí para proteger a los civiles: ni más ni menos".

Contradiciendo la afirmación rebelde de que habían capturado Sirte, el corresponsal de Reuters Michael Georgy informó desde la ciudad que la situación era normal. Vio policía y militares, pero no signos de combates.

Los soldados mantenían los puntos de control y banderas verdes libias ondeaban al viento. Milicianos disparan al aire rifles AK-47. "Si quieren venir a Sirte, defenderemos nuestra ciudad", dijo Osama bin Nafaa, 32, un policía.

Como ciudad natal de Gadafi e importante base militar, Sirte - a medio camino en la costa entre el bastión rebelde de Bengasi y Tripoli - tiene un gran valor simbólico y estratégico. Si cayera, los rebeldes ganarían un impulso psicológico y las carreteras hacia la capital estarán abiertas.

Mientras los rebeldes presionaban en el este, revelaban ataques de las fuerzas de Gadafi en el oeste. Un portavoz rebelde dijo a Al Yazira que fuerzas leales bombardearon de nuevo la ciudad de Misrata, en poder rebelde, y que las fuerzas proGadafi controlaban un tercio de la población. Otro dijo a Al Arabiya que ocho personas murieron y más de 24 resultaron heridas.

Un portavoz rebelde en otra ciudad occidental, Zintan, dijo que las fuerzas leales a Gadafi bombardearon la ciudad con cohetes a primera hora del lunes, informó Al Yazira.

La agencia estatal de noticias libia, Jana, dijo que las fuerzas aliadas habían bombardeado la población de Sabha al amanecer, lo que conllevó varias víctimas.

EXPLOSIONES EN TRÍPOLI

Al menos seis explosiones resonaron en Trípoli el domingo por la noche, seguidos de largar ráfagas de fuego antiaéreo por parte de las fuerzas libias. La televisión libia dijo que se habían producido ataques aéreos en "áreas civiles y militares de la capital".

La televisión estatal libia emitió unas imágenes que afirmó que eran de Gadafi en un coche en el complejo de Trípoli donde cientos de partidarios ondeaban banderas verdes y coreaban eslóganes. Gadafi no pudo ser visto en el coche blanco, pero la televisión dijo que estaba en su interior.

La OTAN acordó el domingo tomar el mando de las operaciones militares en Libia después de una semana de arduas negociaciones, dijo un diplomático y un responsable del organismo, mientras Washington trata de reducir su papel en otro país musulmán ya que tiene abiertas operaciones en Irak y Afganistán.

El secretario de Defensa de EEUU, Robert Gates, dijo que los ataques aéreos occidentales habían "eliminado" la capacidad de Gadafi de mover sus armas pesadas.

Gates también planeó la posibilidad de que el Gobierno de Gadafi pudiera romperse y dijo que una conferencia que se va a celebrar el martes en Londres abordaría estrategias políticas para poner fin a los 41 años de gobierno de Gadafi.

Libia acusó a la OTAN de "terrorismo" y de matar a su pueblo dentro de una trama mundial para humillar y debilitar al país del norte de África.

El Gobierno dice que los ataques aéreos occidentales ha matado a más de 100 civiles, una acusación negada por la coalición que dice que está protegiendo a los civiles de las fuerzas de Gadafi y atacando sólo objetivos militares para hacer cumplir la zona de exclusión aérea.