Mientras que gran parte de los depósitos a tipo fijo han ido rebajando su rentabilidad del 4 al 3%, la opción de los productos de larga duración a tipo creciente va cobrando fuerza como una alternativa para poder obtener un mayor rendimiento a cambio de sus ahorros.
Como ocurre en la vida misma, a algunos les sientan mejor los años, y eso también sucede a la hora de hablar de depósitos bancarios. Las inversiones a largo plazo ofrecen una rentabilidad adicional que puede resultar interesante para aquellos que busquen un tipo de interés atractivo para sus ahorros y no tengan prisa por recuperarlos. Hablamos de los depósitos con interés creciente. Esta modalidad, basada en un plazo de aportación única, asegura una atractiva rentabilidad que aumenta año tras año durante un periodo de tiempo fijado. Sobre la mesa queda un binomio tiempo-rentabilidad que supone un modelo de inversión a riesgo cero, ya que se recupera el cien por cien del capital, como si se tratara de un plazo fijo, pero con evolución ascendente de la rentabilidad. El único problema llegaría en caso de que los tipos de interés protagonizaran una senda alcista significativa y la oferta suscrita a largo plazo se viese superada por la rentabilidad ofrecida en nuevos productos.
La mayoría de depósitos con interés creciente conlleva un compromiso de tres o cinco años aunque hay casos en los que la permanencia puede alcanzar los siete o diez años. Los elevados tipos de interés que ofrecían las entidades en plena guerra del depósito hicieron bajar la demanda por este tipo de productos. Sin embargo, tal y como venimos contando en las últimas semanas, la agresividad de la oferta se ha ido apaciguando y el 4 por ciento ha ido rebajándose al 3 en los carteles de depósitos de bancos y cajas. Es en este punto y con la progresiva subida en el precio de las materias primas -en especial del crudo- o de los intereses hipotecarios cuando el modelo de ahorro creciente puede volver a ser rentable para los ahorradores.
Entre estos depósitos destaca el ofertado por Banca Cívica a cinco años. Durante este periodo el cliente percibirá un 3 por ciento el primer año, un 4 el segundo, 4,5 el tercero, 5 el cuarto y 5,25 el quinto. También destacan los de La Caixa o Unicaja, igualmente a cinco años, con un TAE del 3,5 por ciento. Pero si preferimos menor plazo de compromiso, encontramos el depósito a tres años de Bankia -el nuevo conglomerado financiero compuesto por Caja Madrid, Bancaja, Caja de Canarias, Caja Laietana, Caja de Ávila, Caja Segovia y Caja Rioja- que ofrece un TAE del 4,49 por ciento con liquidación trimestral de intereses.