Sevilla, 13 sep (EFECOM).- El primer teniente de alcalde de Sevilla, Antonio Rodrigo Torrijos (IU), pidió hoy al Gobierno central que "acelere" la redacción del reglamento de la Ley de Haciendas Locales para "facilitar" medidas como la imposición de un recargo del 50 por ciento en la cuota del IBI a las viviendas desocupadas.
La Junta de Gobierno del Consistorio hispalense, donde PSOE e IU gobiernan en coalición, dio hoy luz verde al inicio de las inspecciones municipales para crear un registro administrativo de viviendas "desocupadas permanentemente" en la capital hispalense, a cuyos propietarios impondrá, de acuerdo con el artículo 15 de las ordenanzas municipales sobre el Impuesto de Bienes Inmuebles, un recargo del 50 por ciento.
Rodrigo Torrijos confió en que la medida "sea bien entendida por la ciudad y por las instituciones" y, en este sentido, reclamó al Gobierno que desarrolle el reglamento de la Ley de Haciendas Locales, que recoge ya este recargo como posibilidad, porque, si bien el Ayuntamiento cree que esta iniciativa tiene ya "basamento legal", admite también que "el reglamento lo facilitaría".
El Gobierno local ha aprobado el inicio de las actuaciones para identificar y gravar las viviendas desocupadas con un informe favorable de la Secretaría General del Ayuntamiento, que considera que la medida se apoya jurídicamente en el derecho a la vivienda que recogen la Constitución y el Estatuto de Autonomía y en el texto refundido de la Ley de Haciendas Locales, que incluye esta posibilidad en su artículo 72.4.
Según el primer teniente de alcalde, gravar las viviendas vacías va a servir "para hacer aflorar, si lo hubiere, el mercado irregular del alquiler en Sevilla; para mejorar el censo y el empadronamiento de los sevillanos y para poner en el mercado viviendas de alquiler".
Rodrigo Torrijos destacó asimismo que la intención de este recargo, cuyos "primeros frutos" se verán en el segundo trimestre de 2008, de acuerdo con las previsiones municipales, no es "recaudatoria", como ha asegurado el PP, en la oposición.
La ordenanza municipal entiende por viviendas desocupadas aquellas que no sean la residencia habitual de su propietario, de un familiar o de un tercero a quien le haya sido cedido su uso "por cualquier título" y que no estén sometidas a una "explotación económica", es decir, que no se encuentren en alquiler.
A partir de ahora, el servicio de inspección de la Concejalía de Hacienda cruzará los datos de contribuyentes que tienen que pagar el IBI en Sevilla con los del padrón municipal, para determinar el número de viviendas que están vacías y notificar después a sus propietarios, que podrán alegar, su inscripción en el registro de pisos desocupadas.
El Ayuntamiento de Sevilla calcula que en la capital hispalense existen unos 35.000 pisos desocupados "permanentemente", cuyos propietarios tendrían que pagar un 50 por ciento más de la cuota del IBI, lo que se traduce en una cantidad que oscila entre los 150 y los 200 euros al año. EFECOM
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