Empresas y finanzas

Economía/Finanzas.- Las pérdidas por fraude bancario en todo el mundo cuestan 1 billón de euros al año

MADRID, 4 (EUROPA PRESS)

Las pérdidas por fraude bancario en todo el mundo tienen un coste aproximado de 1 billón de euros al año, aunque la mayor parte de las entidades desconoce la cantidad exacta que le roban, según un estudio de First Data.

Según se desprende de este informe, en el que se han analizado las experiencias y opiniones de expertos de 52 bancos de Europa, Oriente Medio y Africa, la mayoría de los fraudes bancarios tienen lugar través de los cajeros automáticos (36%) y los 'TPVs' (35%), mientras que los fraudes 'online' y en entornos sin tarjeta, representan tan sólo una cuarta parte de los mismos.

El informe refleja que uno de los métodos más utilizados por los delincuentes es el 'skimming', que consiste en copiar la banda magnética, a través de un dispositivo que lee y reproduce la información de la tarjeta original.

De hecho, en 2005, el Servicio de Seguridad de Cajeros Europeos (EAST) informó de que en Europa se habían visto afectadas más de 3.000 tarjetas, con las que se generaron pérdidas de 44 millones de euros.

A pesar de que los fraudes en entornos sin tarjetas y 'online' no representan un porcentaje tan elevado como el de cajeros y 'TPVs', el informe confirma que esta es una práctica que se va extendiendo. En el último año, los ataques de 'phising', correos electrónicos falsos solicitando las claves secretas de acceso a la cuenta bancaria vía internet, se han incrementado un 38%.

Estos ataques son cada vez más sofisticados y efectivos, porque los mensajes de correo electrónico parecen legítimos, con logotipos bancarios prácticamente idénticos y sitios 'web' o URLs muy similares a los originales.

Los expertos consultados indican que la tecnología es una aliada para las entidades en su mejora de los servicios a sus clientes, y el 50% de los encuestados la consideran una prioridad para su banco. Sin embargo, son conscientes de que es un arma de doble filo, ya que además de ayudar a contrarrestar el fraude también abre nuevas vías para los defraudadores.

El 96% de los encuestados cree que el fraude traspasa las fronteras muy rápidamente y dos de cada tres expertos opinan que el fraude es predecible y que se puede anticipar cómo van a atacar, pero no dónde.

En la actualidad, cada país e incluso cada banco, tienen su propio proceso de identificación del fraude. Por eso, los bancos comienzan a plantearse la necesidad de coordinarse entre ellos para hacerles frente, aunque ante la propuesta de regular el sistema, el 50% de los consultados indica que teme que la ley sea demasiado restrictiva.

Otras de las barreras que frenan esta cooperación entre entidades es la competitividad que existe entre ellas, que impide que compartan información útil para combatirlo.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky