Radiotelevisió Valenciana (RTVV) esperará a la segunda jornada de Liga de Primera División, el próximo fin de semana, para ver si la ruptura con Mediapro por los derechos de retransmisión de fútbol es definitiva. Después de no poder ofrecer los partidos de la primera jornada, el segundo canal de la televisión valenciana ha retirado de su parrilla el partido de Segunda que debía ofrecer esta tarde, ante la sospecha de que Mediapro no servirá las imágenes ni le permitirá el acceso a los estadios.
Los administradores concursales de la empresa de Jaume Roures ni siquiera han respondido al burofax que RTVV les envió el pasado martes exigiendo el cumplimiento del contrato que obliga a Mediapro a facilitarle estos partidos, según reconoció ayer el director general del ente público, José López Jaraba.
Jaraba dijo que "no hay ninguna novedad" sobre esta situación, pero se mostró confiado en alcanzar una solución "en los próximos días". En cualquier caso, quiso dejar claro que Canal 9 "no quiere guerra del fútbol, quiere una solución" y "cumplir el contrato vigente" con Mediapro, que concluye al final de la actual temporada de Liga, en el mes junio.
El contrato con Mediapro, accionista de La Sexta, se firmó en agosto de 2006 y otorga al ente público los derechos de transmisión en abierto hasta final de temporada 2010-11, de un partido por jornada tanto de Primera como de Segunda División, así como la emisión de los resúmenes de los partidos de cada jornada. Fuentes de RTVV aseguraron días atrás que Roures intentó hace meses que el ente firmara una prórroga del contrato por un año por el doble de precio que ahora, a lo que Jaraba se negó.
RTVV envió un burofax a los administradores concursales en el que les avisaba de que Mediapro estaba "incumpliendo gravemente" el contrato, por lo que la cadena autonómica se reservaba "la facultad de tomar decisiones de forma unilateral", lo que significa romperlo y exigir a Roures una indemnización por daños y perjuicios, según fuentes de la cadena pública.