El Gobierno de Alemania, que ha ejercido de mediador, ha anunciado hoy que las partes involucradas en el plan de rescate de los centros comerciales Karstadt han alcanzado un acuerdo para salvar a la cadena minirosta de la quiebra y conservar sus más de 25.000 empleos.
El Ministerio de Trabajo aseguró en un comunicado que la inmobiliaria Highstreet ha accedido a rebajar los alquileres de los establecimientos de la marca alemana que posee, 80 de los casi 120 de todo el país, la condición impuesta por el inversor Nicolas Berggruen, cofundador de Liberty Capital, para adquirir el conglomerado en bancarrota.
El acuerdo ya está "sellado" al contar "con todas las firmas necesarias", según el comunicado oficial.
Superviviencia asegurada
"Karstadt se mantiene. Karstadt disfrutará a partir de ahora de una vida animada", ratificó por su parte el multimillonario de 48 años y origen judío Berggruen.
De esta forma, la cadena de centros comerciales, que se declaró insolvente en junio del año pasado, consigue asegurar su supervivencia financiera, así como el futuro laboral de su plantilla, un respiro en la incipiente recuperación económica alemana tras la crisis.
Las negociaciones entre la inmobiliaria y el inversor para el rescate de Karstadt comenzaron el pasado junio, con la mediación del Ministerio de Trabajo alemán.
El desempleo en Alemania aumentó ligeramente el pasado agosto para situarse en el 7,6% de la población activa, aunque se espera que la primera economía europea acabe el año con la cifra de parados más baja de los últimos 18 años gracias a las pequeñas y medianas empresas de servicios.