La entidad fianciera francesa registró entre abril y junio de este año un beneficio neto de 1.080 millones de euros, lo que supone más que triplicar las ganancias obtenidas en el mismo periodo de 2009. Los analistas esperaban un resultado muy inferior, de 777 millones de euros. En el semestre, el beneficio se situó en 2.150 millones de euros.
Los ingresos de Société Générale ascendieron a 6.680 millones de euros, un 17% más que en el segundo trimestre del pasado ejercicio, a pesar de que el área de banca de inversión se anotó un descenso del 34% en la facturación, hasta los 1.750 millones, debido a la crisis de deuda soberana.
En cuanto al importe dedicado a provisiones por impago, se redujo un 6% y se situó en 1.010 millones de euros. El banco ha añadido que esta tendencia de mejora debería continuar en el segundo sementre del año.
Sin embargo, la entidad, que el pasado mes aprobó en el test de estrés bancario europeo, se ha mantenido cauta y ha advertido de que la recuperación económica aún es frágil y que las perspectivas de crecimiento en Europa "permanecen moderadas".
Société Générale: La radiografía del banco
