El banco francés registró en el segundo trimestre del año un beneficio neto de 2.100 millones de euros, lo que supone un incremento del 31% con respecto al mismo periodo del año anterior. Los ingresos se incrementaron un 12% hasta los 11.170 millones de euros.
El resultado es mucho mejor de lo esperado. En concreto, los analistas consultados por Efe Dow Jones habían previsto uas ganancias practicamente en línea con las del pasao ejercicio, alrededor de 1.630 millones de euros.
Según indicó la entidad, el beneficio creció en estos tres meses impulsado por la banca de consumo y créditos, que contrarrestó la mala evolución de la banca de inversión, afectada por la crisis de deuda soberana en Europa.
De hecho, la división de banca de inversión registró un descenso del 30% en sus ingresos. El negocio de renta fija se vio afectado por "la considetrable contracción en los mercados primarios, los mayores diferenciales de crédito y la elevada volatilidad", destacó el banco en la nota recogida por Bloomberg.
En el segundo trimestre, BNP redujo el volumen destinado a provisiones un 54% hasta los 1.080 millones de euros, el nivel más bajo desde 2008.
En cuanto al ratio de capital Tier 1, que mide la solvencia de la entidad, mejoró ligeramente al 10,6% a junio en comparación con el 10,5% registrado a finales de marzo.
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