La empresa Odyssey Marine Exploration ha firmado que el navío hundido del que ha recuperado medio millón de monedas de oro y plata valoradas en 371 millones de euros no se encontraba en aguas territoriales españolas y tampoco es el HMS Sussex.
La compañía estadounidense confirmó que el 'Cisne Negro', como ha bautizado al buque, "no es el HMS Sussex - buque del siglo XVII de bandera inglesa que la compañía cree que se encuentra en el fondo del Mar de Alborán (al este del Estrecho de Gibraltar)-. " y "no se halló en aguas próximas a donde se cree que está el HMS Sussex".
Pendientes de identificar el barclo
Aun así, la compañía aún está pendiente de que la Junta nombre a unos buceadores encargados de vigilar a los arqueólogos de Odyssey para poder realizar prospecciones en el Mar de Alborán -situado al este del Estrecho de Gibraltar- y poder indentificar la embarcación.
Las especulaciones en torno al origen del tesoro se han centrado también en un pecio hundido cerca del Canal de la Mancha, que separa Francia de Gran Bretaña, sobre el que Odyssey recientemente pidió permiso a un tribunal estadounidense para recuperar su botín.
Un abogado de la compañía indicó en otoño pasado a un juez federal que la empresa creía haber encontrado los restos de un buque mercante del siglo XVII que se había hundido con un valioso cargamento a bordo a unos 65 kilómetros al suroeste de Inglaterra.
Conflicto con los derechos del tesoro
Un juez otorgó a la empresa el miércoles pasado derechos exclusivos sobre este yacimiento, sólo dos días antes de que Odyssey anunciara el descubrimiento de las 500.000 monedas. Por el momento, la compañía ha rehusado decir si ese botín procede de aguas próximas al Canal de la Mancha.
El Gobierno español ha abierto una investigación para averiguar en qué lugar encontró la empresa el botín, a qué pecio pertenecía, con qué permisos contaba para hacerlo y si lo halló en aguas españolas, según indicó hoy desde Sevilla la ministra española de Cultura, Carmen Calvo.
"Cuando lo sepamos con claridad, actuaremos con arreglo a las leyes españolas, que dicen que el patrimonio subacuático que está en el litoral español es de España, y activaremos todos los acuerdos internacionales a los que en esta materia podemos acogernos", subrayó.