¿Quijote o Cid Campeador?. Por su origen manchego y por su ánimo de luchar contra los gigantes de la banca, Jesús González Martínez de la Casa podría encajar en el papel del hidalgo caballero que ideó Miguel de Cervantes, pero lejos de la literatura, este empresario de la localidad toledana de Torrijos está dispuesto a pasar a la historia como el batallador que se enfrentó al problema de acceso al crédito que sufren las pymes y al que le plantó cara con su propia solución: una caja de empresarios, hecha por los empresarios y para los empresarios.
Caja Pyme comenzó a fraguarse en octubre del pasado año, momento en el que, dadas las dificultades de acceso al crédito que padecían muchas de las pymes y autónomos, surgió la necesidad de buscar una alternativa. ¿Cuál? Jesús González comenzó a estudiar el modelo de Banpyme, que a mediados de los setenta crearon 200 empresarios en Cataluña y se planteó implantar ese sistema en Castilla-La Mancha.
"Lo que buscamos es salvar los obstáculos que nos está poniendo la banca para acceder al crédito" argumenta Jesús González y... ¿cómo se pueden salvar? El empresario ha hecho sus cálculos y lo tiene claro: teniendo en cuenta los 150.000 afiliados que existen en Castilla-La Mancha entre pymes y autónomos, con una contribución de 10.000 euros por cabeza la caja nacería con una dotación inicial de 1.500 millones de euros.
Aunque la cifra se redujese a la mitad, superaría holgadamente los 20 millones de euros que exige el Banco de España para constituir una entidad de crédito y esa es una de las razones que han llevado al Jesús González y su equipo a solicitar la documentación necesaria a la institución para iniciar los trámites legales para la inscripción.
Con una ilusión contenida, Jesús González explica que a los empresarios, además de prestarles los servicios habituales de una entidad financiera, se les dará asesoramiento legal y financiero, se acompañará a las empresas en sus aventuras internacionales, se ofrecerán productos financieros de la banca tradicional para los socios sin comisiones y no existirá el ánimo de lucro. Eso sí, que ninguno de los asociados se engañe: "La filosofía del riesgo será la misma que la de la banca tradicional, se vigilará operación por operación, y la que no sea viable se reordenará", aclara.
Apoyos
Ante esta atractiva oferta, el empresario de Torrijos asegura contar con el apoyo de más de 1.200 colegas de la región. La Federación de Empresarios de Toledo (Fedeto) fue una de las primeras instituciones en conocer el proyecto, un plan ante el que sus asociados reaccionaron de forma desigual. "Me he encontrado con gente que me dijo que adelante, que esto es una bomba? y con otra mucha gente que me decían que eso es una locura, y que ¿cómo le voy a plantar cara a los bancos?", explica Jesús González. Pero no se arredra.
El empresario asegura que al presidente de la Junta, José María Barreda, le pareció "una buena idea" la puesta en marcha de un modelo del que dijo que se podría exportar a otras comunidades. Aunque él no lo dice, se saca la espina de CCM.
"Este es un proyecto a medio y largo plazo, cuya velocidad de crucero dependerá de los apoyos que vayamos sumando", responde el empresario a la pregunta de cuándo se ve dando créditos a través de una ventanilla. Y para pisar el acelerador ha lanzado una prolija encuesta a través de la que sondear los apoyos que le brindarían sus colegas.
Ese será el termómetro definitivo, para que Jesús González se arme de razones para plantarse ante quienes tan sólo ven en su iniciativa una quijotesca idea.